-
Secretos de Padre e Hijos
Fecha: 16/07/2025, Categorías: Gays Incesto Autor: Hotman, Fuente: SexoSinTabues30
... estaba moviéndome con más intensidad y aquel dolor solo se había convertido en placer al doble de lo que fue el dolor, mi padre tomó mis cadera y casi dejándolas en el aire retirando un poco su verga, comenzó a moverse con gracia y agilidad, a un ritmo lento pero constante, cuando las envestidas estaban más rápidas y eran más placenteras, mi padre metió toda su verga y sin sacármela, se puso de pie, me llevó cargando hasta el borde de la cama, me dejó de espaldas, aún pegado a su verga, se inclinó y me empezó a besar apasionadamente, penetrando mi boca con su lengua, acompañando cada beso con envestidas en mi culo, así estuvo por un rato, cuando se despegó de mi boca, comencé a gemir como loco, mi padre me daba más rápido. De repente me dijo, bebé quiero que termines para poder terminar bebé, me comencé a masturbar y en pocos segundos, varios chorros de semen bañaron mi abdomen, casi al mismo tiempo que terminé, mi papa comenzó a dar fuertes gemidos, envestidas y espasmos acompañados de chorros de leche dentro de mi ano, se derrumbó sobre mi besándome con pasión, sacando despacio su verga de mi culo, se tumbó a mí lado y me acaricio la cara con cariño, así estuvimos un rato en silencio, hasta que mi papá rompió ese silencio. Andrés: que rico estuvo bebé ...
... ¿te ha gustado cómo lo hizo tu padre? Memo: me ha encantado, aunque no lo esperaba, después de todo lo sucedido. Andrés: sabes bebé, este será nuestro secreto, si lo sabes guardar, tendrás a tu papi para complacerte, y hacerte feliz todos los días. Memo: gracias papi, me has dado una excelente experiencia y un gran placer, que casi me vengo sin tocarme. Andrés: verás como la próxima vez, así será, te vas a correr sin tocarte. Memo: ya quiero que llegue esa próxima vez. Andrés: verás mañana, como la pasaremos todo el día y noche juntos disfrutando, Memo: papá, pero mañana es veintitrés, tenemos que alcanzar a mis hermanos con mis abuelos. Andrés: prefiero estar a tu lado consolándote a viajar a ver la familia de tu madre la mojigata, o ¿tú quieres ir? Memo: donde estés tú, yo estaré feliz. Andrés: no se diga más, nos vamos el día veinticuatro, que no creo que le hagamos falta a tu mamá. Andrés y Memo se quedaron a disfrutar de su pasión, el día siguiente repitiendo las hazañas de la noche anterior, Andrés cumplió la promesa a su hijo, de hacer que se viniera sin siquiera tocarse, pero eso será en otro relato. Toda la serie de este relato que comenzaré a publicar son de autoría de mi amigo Cornelio. Espero que les haya gustado