Martina-2
Fecha: 24/07/2025,
Categorías:
Transexuales
Autor: InesPerra, Fuente: TodoRelatos
Pasaron algunas semanas desde mi primera “quedada” con Marta. Tal y como me comentó, empece a salir con ellas de compras, de modo discreto por tiendas que ellas conocían bien, pero yo todavía no me había atrevido a cambiarme de ropa. Poco a poco mi guardarropa femenino iba aumentando. Marta y Laura conocían mi talla y siempre compraban cosas para mi (que yo luego les reintegraba)...al principio me dio algo de vergüenza ir con ellas, pero conseguí superarlo. Poco a poco, y siempre yendo con ellas a lugares “seguros”, me iba soltando y podía comprar ropa femenina hablando con el dependiente y sin la ayuda que antes necesitaba. Tenía controlada la ropa interior de Chantelle, las medias y también el calzado que tenían en un par de zapaterías.
Al principio la idea era que vendrían por casa para chafardear y todo eso, pero solo pudieron una vez, por cosas que pasan, hoy por ti, mañana por mi...
Uno de los consejos de Laura era que practicase con ellos todo lo que pudiera, los que tenía era de tacón de 12 cm.
En la soledad de mi apartamento, me vestía con la ropa que me había ido comprando y les mandaba fotos a mis nuevas amigas para que me indicasen sus opiniones. Yo ya tenía algo de práctica con la ropa de mi mujer antes de llegar a Madrid, pero esto era otra cosa, era una ropa bastante más picante que la de mi esposa. No me traje nada de ella de Burgos.
Y así iban transcurriendo los días, por supuesto que solía ir de copas con ellas y con más gente a pubs y a alguna ...
... discoteca a bailar...conocí a algún chico guapo, pero nada serio, me asustaba ligar todavía y tanto Marta como Laura lo entendían. Laura era más lanzada que Marta, pero Marta también era muy lanzada, siempre ligaban y acababan yendo con unos y con otros, a sus casas o a las de ellos; iban a follar, lo se porque cuando nos veíamos para merendar siempre hablaban de las pollas de sus amantes y de si les gustó la experiencia.
Lo cierto es que picaban de flor en flor y parecían felices.
Marta era abogada, pero no ejercía, se ganaba la vida, y muy bien, traduciendo documentos legales para compañías. Hablaba muy bien Ingles y tenía buenos contactos con varios despachos de abogados de cierto prestigio. Trabajaba en su casa y no necesitaba un jefe que le marcase su horario. Era muy seria con eso.
Laura era rica porque dio un par de pelotazos en el momento oportuno con las criptomonedas que le dejó limpios casi un millón y medio de euros...los invirtió en bienes inmuebles en ciudades extranjeras y apartamentos de lujo en la costa de Andalucía.
Yo no tenía problemas para alternar con ellas porque también tenía dinero, un buen apartamento, un Tesla en el garaje...y ganas de vivir.
O sea, la cosa iba a un ritmo natural...hasta que ocurrió algo inesperado.
Laura tuvo que marcharse a Londres durante unas cuantas semanas a resolver asuntos allí (yo creo que fue a estar con un amante), y en el edifico de Marta Hubo un reventón de una cañería maestra que inundó algunos pisos y ...