El conejito tierno de mamá - Relatos Eróticos

El conejito tierno de mamá

Todos los personajes son mayores de 18 años.
Una historia tierna y amorosa sobre el incesto entre madre e hijo. 
Me gustan los detalles por eso este relato es un poco largo vale la pena leerlo completo espero que lo disfruten

  
Si a una persona normal se le pidiera que describiera a Denilson Menéndez, la última palabra que le vendría a la mente sería "conejito tierno". Con una altura de 1,88 m, este joven de 23 años tenía un cuerpo perfectamente esculpido gracias al tiempo que pasaba en el gimnasio. Cabello castaño, ojos azules y una sonrisa cautivadora eran más que suficientes para hacer que cualquier chica o mujer se desmayara. Guapo, bien formado y musculoso eran palabras apropiadas para describirlo. Sin embargo, para la única mujer de su vida, él era su "conejito tierno".

Lucia Menéndez, la mujer en cuestión, tenía 40 años y era la orgullosa madre del jovencito fornido. Medía 1,66m descalza. Lucia tenía un espeso pelo castaño que mantenía a la altura de los hombros y unos suaves ojos castaños. Un cuerpo muy bonito que mantenía en forma con sesiones regulares con su hijo en el gimnasio del sótano.
 Y los pechos... ¡Dios mío, los pechos! El busto de Lucia era de un envidiable 34F.
 Incluso a su edad, los pechos habían conservado su exuberancia juvenil, con solo un ligero descolgamiento.
 Y la cereza del pastel era su trasero increíblemente curvilíneo.


Lucia, auditora interna de profesión, había trabajado duro para triunfar en el campo que había elegido. ...

... 
Por supuesto, la principal motivación de Lucia era asegurarse de que su bebé estuviera cómodo en todos los sentidos posibles. El éxito profesional, un cuerpo de infarto y un rostro increíblemente bonito habrían sido suficientes para atraer la atención de cualquier hombre.


Sin embargo, la mayoría de los hombres no se acercaban a Lucia. 
Denilson se aseguraba de que así fuera.
 Era extremadamente protector con su madre y rara vez la perdía de vista. 
Si un hombre lograba reunir el coraje para acercarse a la MILF pechugona, se encontraría con un Denilson ceñudo detrás de ella. 
Una mirada furiosa y un gruñido amenazador de su parte eran más que suficientes para hacer que el desventurado agresor saliera corriendo en la dirección opuesta.

Lucia no echaba de menos la compañía de los hombres. Estaba muy contenta de ser madre soltera. Había sido ingenua cuando era más joven y le había entregado su virginidad al primer chico que dijo que la amaba: el padre de Denilson. 
El triste hombre se había escapado después de dejarla embarazada, dejándola sola para criar a su dulce bebé.
 No es que le importara.
 Al principio le había dolido que la abandonaran, pero pronto se dio cuenta de que el bulto de alegría que crecía en su interior era una compensación más que suficiente por la traición que había sufrido.


Ella amaba profundamente a Denilson, su orgullo y alegría.
 Y la verdad sea dicha, Denilson había asumido el papel de hombre de la casa desde muy joven. Arreglaba el ...