El conejito tierno de mamá - Relatos Eróticos

El conejito tierno de mamá

... adaptarme un poco".

"¿Incómodo?"

"Un poco sensible y dolorido."

"Ay, mi pobre bebé. ¿Te duele?"

—Sí, mamá, me duele un poco —admitió.

Lucia se mordió el labio inferior. "¿Y qué habrías hecho para solucionar ese dolor normalmente?"

—Bueno yo subíria a mi habitación y... —La voz de Denilson se fue apagando.

- ¿Y qué, cariño? -preguntó su madre con dulzura.

Llevaba ya casi 24 años en este planeta y Denilson nunca ni siquiera una sola vez, le había mentido a su madre. No iba a empezar ahora.

"Y masturbarme. Pensando en ti. Como siempre. Como cada vez, mamá. Siempre pienso en ti", dijo.

"¿Me encuentras atractiva?"

La pregunta lo sorprendió.
 “¡Por ​​supuesto! ¡Eres la mujer más hermosa del mundo!”, insistió, sorprendiéndolo incluso a él con su vehemencia.
 Luego se suavizó y continuó: “Pero no es solo lo bonita que eres o lo increíble que es tu cuerpo. 
Te amo porque siempre has estado ahí para mí y has trabajado tan duro, solo para que yo pudiera tener las mejores cosas de la vida. Amo cuánto me amas ” .

Lucia sintió como si un millón de mariposas revolotearan en su estómago, tuvo que morderse el labio para no sonreír como una idiota. 
"Hmmm. Y cuando te masturbaste anoche cariño.
 ¿Pensabas en mí?"

—Ah, sí, mamá. Y anoche fue la mejor masturbación que e hecho
 Nunca me había corrido tanto, por supuesto. Pensando en ti. Y en nosotros —añadió, con la voz apenas en un susurro.

"Ya me lo imaginaba. Me sorprendió bastante ver las ...

... enormes manchas de semen que dejaste en mi sujetador. Mucho más de lo habitual".

Denilson se sonrojó profundamente ante sus palabras.

Lentamente, Lucia se dio la vuelta para mirarlo. 
La parte superior del bikini que su hijo había desatado se cayó. A Denilson se le secó la boca. 
Los pechos de su madre estaban frente a él. Sabía que eran grandes y maduros, pues los había mirado furtivamente mientras se cambiaba, pero ahora los tenía justo frente a sus ojos. 
Más grandes y cremosos de lo que recordaba.
 Sus pezones eran gruesos y estaban perfectamente alineados. No podía imaginar una vista más perfecta en el mundo.

Lucia sonrió al ver su expresión de asombro. Señaló la tienda de campaña que había en su ropa interior. 
"Adelante, cariño. Hemos sido abiertos en todo lo demás, Haz lo que necesites para sentirte mejor, No soporto ver a mi bebé tan incómodo".

Como si estuviera operando con piloto automático, Denilson sacó su polla. 
Podría haber jurado que los ojos de su madre brillaron al ver su longitud.
 Lentamente comenzó a masturbarse, disfrutando de la increíble vista del cuerpo de su madre. Se sentía tan bien hacer esto cuando ella estaba realmente frente a él, en lugar de solo estar en su cabeza. No podía imaginar que esto mejorara. Bueno, podría , ¿se atrevería a intentarlo?

Vacilante, extendió su mano libre hacia sus pechos, luego se detuvo, sin estar seguro de cómo reaccionaría su madre.

La intuición de madre entró en acción.
 Lucia sabía lo que su ...