La novia de mi hija - Relatos Eróticos

La novia de mi hija

... perrita siendo dominada por ella. Ana le quitó los tacones a Pilar y le empezó a chupar los dedos de los pies, esta estaba gozando mucho porque nunca antes le habían chupado los pies y se sentía delicioso, y pensó que con razón la hija gemía como una puta siendo follada por ella, y Ana se metió en la boca cada uno de los dedos y los chupó delicadamente, cuando chupó todos los dedos empezó a deslizar la lengua por sus piernas, la empezó a subir lentamente dándole pequeños mordiscos, Pilar se sentía como una perra porque nunca antes la habían follado así de rico, Ana siguió subiendo lentamente la lengua y llegó hasta los muslos, Pilar gemía de placer ante la inminencia de sentir a una mujer chupándole el coñito. Ana siguió subiendo la lengua y la puso en el clítoris de Pilar encima de las tanguitas y esta tembló de placer y pensó en que iba a sentir chupándole el coñito a otra mujer, eso la hizo sentir mucho morbo, Ana le quitó las tanguitas.

-Te arrecha saber que te voy a chupar el coñito –preguntó Ana-

-Sí, me arrecha mucho –respondió Pilar con la respiración entrecortada-

-Ni te imaginas lo mucho que fantaseé con este momento –replicó Ana-

-Me arrecha mucho saber eso –dijo Pilar-

Ana miró fijamente a Pilar y puso su lengua en el enorme clítoris de Pilar y lo succionó y se puso más arrecha al sentir como empezó a temblar y a gemir, luego puso su boca en los labios y los succionó tragándose todo el jugo que había pegado en ellos y lo saboreó sintiendo su sabor ...

... por toda la boca, luego su lengua recorrió todos los rincones del coñito de Pilar, pasaba su lengua de abajo hasta arriba y dejaba que su lengua recorriera su clítoris y lo succionaba, luego sin despegar la lengua volvía a bajar y cada vez que pasaba por los labios los succionaba para quitar todo el jugo que estaba saliendo de su coñito, luego hizo que Pilar subiera las piernas y puso su lengua en el ano y lo empezó a recorrer con ella, luego empezando desde el ano empezaba a subir la lengua hasta llegar al clítoris y lo succionaba y lo mordía, y volvía a bajar hasta su ano y lo presionaba con la lengua como si lo fuera a penetrar, Ana le metió los dedos y empezó a buscar su punto G, recorrió las paredes de su coñito hasta que llegó al punto en el que Pilar apretó su coñito y Ana supo que había llegado al punto exacto y sin quitar los dedos de él empezó a recorrer con su lengua el enorme clítoris de ella.

-Me vas a hacer venir –dijo Pilar-

-Quiero que te vengas en mi boca –replicó Ana-

Y Ana tocando el punto G de Pilar y masajeando su clítoris con la lengua hizo que ella tuviera un estrepitoso orgasmo en su boca. Ana quería que Pilar tuviera varios orgasmos antes de que chupara su coñito, así que en vez de parar chupó nuevamente sus labios y se tragó todo el jugo que le estaba chorreando de su coñito y muy duro con sus dedos, empezó a penetrar fuertemente su coñito mientras le chupaba el ano, Pilar empezó a revolcar su coñito de toda la arrechera que estaba sintiendo, ...