Toques calientes y mas en el tren - Parte 1
Fecha: 04/10/2025,
Categorías:
Sexo con Maduras
Autor: Nicole Hot, Fuente: TodoRelatos
... hundió dos dedos dentro de ella, haciendo que gritara su nombre mientras el vagón seguía avanzando hacia lo desconocido.
El ritmo de los dedos de Martín dentro de Helena era implacable, cada movimiento calculado para llevarla al borde del abismo, sus caderas se sacudían involuntariamente, siguiendo el compás que él marcaba con maestría, el sonido húmedo de su excitación se mezclaba con los jadeos que escapaban de sus labios, cada vez más frecuentes, más desesperados — "Ah… no puedo… esto es demasiado…" — murmuró, sus palabras entrecortadas, sus uñas clavándose en los muslos de Martín sin siquiera darse cuenta, el placer la consumía, la transformaba, la hacía olvidar que estaban en un tren, que cualquiera podía entrar en cualquier momento, que esto estaba mal de tantas maneras… pero en ese instante, nada importaba excepto la sensación que crecía dentro de ella, como una ola a punto de romper.
Martín la observaba con ojos oscuros, llenos de satisfacción, su otra mano seguía guiando la de Helena alrededor de su miembro, enseñándole el ritmo que a él le gustaba, lento pero firme, cada bombeo hacía que un gruñido gutural escapara de su garganta — "Mírate… tan perdida en lo que sientes…" — susurró, acercándose para morder su oreja con suavidad — "Vas a venirte, nena, y lo harás como una buena chica, ¿verdad?" — sus palabras eran una orden disfrazada de pregunta, y Helena, con los ojos vidriosos, solo pudo asentir, incapaz de negarse, incapaz siquiera de pensar.
La ...
... presión en su bajo vientre se volvió insoportable, cada roce de sus dedos, cada palabra susurrada en su oído, cada latido de su propia sangre en sus sienes la acercaban más y más al borde — "Martín… por favor…" — suplicó, sin saber exactamente qué estaba pidiendo, pero él lo entendió, aceleró el movimiento de sus dedos, añadiendo un giro sutil cada vez que se retiraban, su pulgar presionando con firmeza su clítoris hasta hacerla estremecer — "Ahora, Helena… déjate ir" — ordenó, y como si sus palabras hubieran roto un hechizo, el cuerpo de Helena se tensó como un arco, su espalda se arqueó, sus piernas temblaron, y un grito ahogado escapó de su garganta mientras la ola de placer la golpeaba con una intensidad que nunca antes había sentido, su visión se nubló, su cuerpo se convirtió en pura sensación, en puro éxtasis, en nada más que la descarga eléctrica que la recorría de la cabeza a los pies, sacudiéndola una y otra vez mientras Martín la miraba con orgullo, disfrutando de cada espasmo, de cada gemido, de cada contracción de su cuerpo alrededor de sus dedos.
— "Dios mío…" — jadeó Helena cuando finalmente pudo respirar, su cuerpo colapsó contra el asiento, agotado, sudoroso, pero aún sensible a cada pequeño movimiento de sus dedos dentro de ella — "Por favor… para…" — suplicó, pero Martín no parecía dispuesto a detenerse, sus dedos se movían más despacio ahora, pero aún allí, prolongando su orgasmo hasta el punto del dolor — "Todavía no, nena… mira lo que me hiciste" — gruñó, ...