La brocheta de Fergie - Relatos Eróticos

La brocheta de Fergie

... esfuerzos, corriéndose pronto, liberando la calentura acumulada. Mateo me enterró por última vez su verga con un gemido exótico, quedándose unos momentos dentro mío, hasta que finalmente su miembro fue perdiendo fuerza y lo retiró, dejándome el agujero con una sensación de vacío difícil de explicar, jajajajaja. Por otro lado, Sergio supo detenerse a tiempo, sacando su verga de mi boca a pocos milisegundos de su explosión. Apenas me di cuenta en el momento, pero el lechazo me llegó en los brazos y en la espalda. Una vez que terminó de correrse, mi amigo me acarició por última vez el pelo y me dijo que me había ganado la libertad, soltando por fin mis muñecas.

Los tres estábamos bastante cansados, pero obviamente satisfechos; yo por lo menos mantenía una sonrisa en mis labios, pensando en lo divertido de la situación. Después de un rato, y de limpiarnos todos con unas toallitas, nos acostamos en la gran cama (yo al medio, de nuevo) y charlamos más o menos por una hora. Los chicos obviamente dijeron que había que repetir, y yo expresé mi acuerdo, aunque debo decir que eso nunca se materializó con ambos. Sí tuve otras experiencias con Mateo y con Sergio, pero por separado.

Creo que no necesito agregar más a esta historia, porque los detalles posteriores no tienen nada de especial. Pero sí quiero que tengan en mente que en la segunda historia también participa Sergio… y que en esa ocasión decidí jugar en los mismos términos que él. Entre su compañera Edith y yo nos divertimos bastante a su costa. Pero eso vendrá en otra entrega.

FERGIE