Karoline & Kiera Cap16: El cuarto día y la carta - Relatos Eróticos

Karoline & Kiera Cap16: El cuarto día y la carta

... movía con gracia.

A las 3:45 p.m., listas y llenas de anticipación, abandonaron su suite y se dirigieron al segundo piso. La habitación principal, un espacio amplio con una cama circular, cadenas en las paredes, espejos por todas partes y una iluminación tenue, las recibió con un aire de misterio. Sabían que los hombres llegarían pronto, y el día prometía ser tan intenso como los anteriores, con sus nuevos roles definiendo la experiencia.

A las 4:00pm Karoline y Kiera entraron en la habitación principal del segundo piso, sus corazones latiendo con una mezcla de nervios y excitación tras leer las instrucciones de sus cajas. Sin embargo, lo que encontraron fue completamente distinto a lo que habían anticipado. La habitación, iluminada con una luz tenue y cálida, estaba transformada en un escenario de placer voyerista. Los seis hombres —Andrei, Dmitri, Luca, Hans, Pierre e Ivan— estaban presentes, distribuidos en sillones de cuero alrededor de una cama circular cubierta con sábanas de satén negro. Sus miradas eran intensas, sus cuerpos semidesnudos mostrando músculos tensos y erecciones visibles bajo sus pantalones ajustados. La habitación estaba repleta de juguetes sexuales: dildos de todos los tamaños, vibradores, látigos, cuerdas, y en el centro de la cama, un dildo de doble punta, largo y grueso, brillando con lubricante.

Ivan, desde su posición dominante, se puso de pie y rompió el silencio. "Hoy será diferente, chicas", anunció con una voz fría pero cargada de ...

... deseo. "Queremos veros daros placer mutuamente. Usad el dildo de doble punta y hacedlo bien. Cada vez que uno de nosotros esté a punto de acabar, os acercaréis y mamareis nuestra verga. Comencemos." Sus palabras dejaron a Karoline y Kiera atónitas, pero la excitación pronto superó la sorpresa. Sus roles como esclava principal y dominatrix secundaria parecían fusionarse en esta nueva dinámica, y ambas asintieron, listas para complacer.

Se subieron a la cama, sus atuendos resaltando sus figuras afeminadas: Karoline con el corsé de encaje negro y el plug con cristal rojo, Kiera con el body de látex rojo y el plug con base azul. Se miraron con una sonrisa cómplice antes de comenzar. Kiera tomó la iniciativa, acercándose a Karoline y besándola profundamente, sus lenguas entrelazándose mientras sus manos exploraban. Karoline gimió, desatando el lazo rojo de su pene diminuto, que ya goteaba de anticipación. Kiera deslizó una mano bajo el corsé, pellizcando sus pezones endurecidos, arrancándole un grito suave.

Luego, tomaron el dildo de doble punta, sus ojos brillando con deseo. Kiera se posicionó de rodillas, lubricando una punta con sus labios antes de guiarla hacia su culo, donde el plug ya la había abierto. Con un gemido profundo, lo insertó, sintiendo el estiramiento mientras lo empujaba dentro. Karoline, siguiendo su ejemplo, lubricó la otra punta y se colocó frente a Kiera, alineando el dildo con su entrada. Con un movimiento lento pero decidido, lo introdujo en su culo, el ...