1. El amor de mi esclava


    Fecha: 28/04/2018, Categorías: Dominación BDSM Autor: charlygaucho, Fuente: CuentoRelatos

    ... la dominación. La mía venció, traspuso su última resistencia y, al mismo tiempo que la mano comenzaba a descender siguiendo la zanja sagrada de su agujero invicto, alcanzó el fondo de su boca, la puerta de su garganta. La otra mano abandonó la teta que presionaba para tomar su nuca y soldar más aún nuestra unión bucal, mientras la restante se apoderaba de su culo y lo transitaba de lado a lado. Cuando, exhaustos nos separamos un poco, le sugerí: - ¿Vamos a la cama? - Vamos donde quieras, a la cama, al piso, al sillón… parada, sentada, de rodillas… lo que quieras… soy toda tuya… decime y te sigo. - ¡A la cama, entonces! Claudia se puso de pie, se sacó la camisa y graciosamente se puso en posición de firme, se cuadró, hizo un simulacro burlesco de venia militar y expresó: - ¡Sí, señor! ¡A la orden! ¡Cómo usted disponga! - ¡Entonces a la cama, soldada! ¡Subordinación y valor, para servir al superior! Nuestras risas estallaron espontáneamente frente al grotesco de la situación. Ella hizo un giro cerrado y comenzó a marchar militarmente hacia la cama. Cuando pasó frente a mí no pude dejar de aprovechar la oportunidad y mi mano derecha en un movimiento imperceptible se alzó con fuerza, velocidad y contundencia para impactar contra ese rotundo culo que transitaba frente a mis ojos. Claudia sintió el impacto, colocó sus dos manos sobando su culo, tratando de calmar el ardor y la picazón que sentía, mientras me miraba haciendo un puchero: - ¿Me porté mal? ¿Me equivoqué? ¿Qué ...
    ... hice? - No. Te estás portando excelentemente bien. - Entonces, ¿porqué? - Quizás porque tenía ganas de hacerlo, a lo mejor trataba de ayudarte para que pudieras experimentar lo que sintió Lee en ese momento, puede ser que no haya podido resistirme a la tentación cuando semejante culo pasó frente a mí. ¿Algún problema? - Sí… No me alcanzó. Giró para que su culo quedase frente a mí y sin dejar de mirarme, me dijo. Las cosas hay que hacerlas bien… estoy esperando. Lanzando una carcajada, le dirigí un nuevo nalgazo que impactó en su globo derecho y mientras exhalaba un quejido y sin dejarla reaccionar le puse otro en su otro cachete. - Auuuccchhhh. Eso dolió y mucho. - Estoy aprendiendo a hacer las cosas bien, como me lo pediste… no te vas a poder quejar que los repartí equitativamente. En tanto ella se sobaba el culo a dos manos tratando de disipar el efecto de los impactos sobre sus asentaderas, comenzó a caminar hacia la puerta del dormitorio. - ¡Alto soldada! ¡Usted no sabe que después de recibir un castigo debe exhibir ante su superior la zona castigada para que éste aprecie si los azotes impartidos son suficientes o hay que reforzarlos! Mientras el rubor encendía su rostro, mostró su culo enrojecido y ardiente, viéndose claramente dibujados en sus azotados cachetes la silueta de mis dos manos. - ¿Usted que cree soldada? ¿El castigo fue suficiente o deberíamos reforzarlo con otra dosis? - Suficiente… suficiente… muy suficiente, tal vez, excesivo… - ¡¿Cómo?! - No, señor, fue ...
«12...202122...73»