Juana, la princesita de papá
Fecha: 02/06/2018,
Categorías:
Incesto
Autor: kiko, Fuente: CuentoRelatos
... dio la vuelta, pero Juana lo había visto. -¿Querías algo, papá? Ismael le contestó desde el pasillo. -Nada de importancia. -¿Me tienes miedo, papá? -Mucho, hija, mucho. -Prefieres pajearte con un video porno o follar con tu madre que hacerlo conmigo -Eres mi hija. Eres mi princesita. -O comes a la princesita o la princesita le dice a su abuela que su padre y ella se pajearon juntos. -¡No serás capaz a hacerme eso! -Puede que sí, puede que no. -¿Qué quieres que te coma? -Que te vea para decírtelo. Ismael fue a la puerta de la habitación. Juana, sentada, y con las piernas entrecruzadas, le dijo: -Esta. -se tocó los labios con un dedo- Estas, - cogió las tetas con las dos manos- y esta -puso una mano en el coño. Ismael entró en la habitación y se iba a meter con el batín en cama. -Desnúdate y échate boca arriba. -Dijiste... -Tranquilo que no te voy a follar. Ismael se desnudó y se echó boca arriba en la cama. Estaba empalmado. Juana se sentó sobre su pierna derecha. Después se estiro sobre él. Se besaron con lengua... Ismael sintió como el coño empapado de su hija comenzó a moverse sobre su pierna, más, más, más y más rápido... Unos minutos más tarde se derrumbaba sobre él, gimiendo y temblando. Ismael sintió como la corrida calentita de su hija le bajaba por ambos lados de la pierna. Al acabar, lo besó, tiernamente. Le dio las tetas a chupar y un poco más tarde, viendo el empalme que tenía, le preguntó: -¿Seguro que ...
... no quieres que te coja la verga y la meta en mi coño? -Seguro. -Lo tengo apretadito. ¿Seguro que no quieres cogerme? -Seguro. Juana, no se cansaba de insistir. -¿Seguro, seguro, seguro? -¿Te quieres correr otra vez o lo dejamos? -Me quiero correr otra vez. Juana le puso el coño en la boca a su padre. Ismael sacó la lengua y dejó que se la follara a su aire. Juana, enseguida se puso cachonda, y no dudó en ponerle el ojete a tiro, y preguntarle: -¿Te importaría comérmelo un poquito? Ismael le lamió y le folló el agujero del culo con la lengua. Cuando ya llegaba un ratito follándoselo, le dijo Juana a su padre: -¡Dios! Como me gustaría sentir tu polla dentro de mi culo. Sentir como entraba apretada... como iba haciendo sitio... sentir como entraba y salía... sentir como me lo llenabas de leche... tocarme y correrme... ¿La meto? Ismael, era padre, pero hasta un padre tiene sus límites, y le dijo; -Mete. Juana, metió, pero metió en el coño, y fue meter la verga cabezona y comenzar a correrse. ¡Quién se la quitaba viendo cómo se retorcía de placer! Al acabar de empaparle los huevos con una grandiosa corrida, Juana, quitó la verga del coño. La puso en la entrada del culo, y le dijo. -Dale y lléname. Ismael aún no le metiera toda la cabeza de la verga y ya se corrió. Estaba demasiado caliente. ¿Acabarían haciendo un trío? Yo lo sé, vosotras y vosotros podéis pensar lo que queráis. Se agradecen los comentarios buenos y malos.