1. La noche que fui sola a un bar


    Fecha: 14/06/2018, Categorías: Voyerismo Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... pero no me importó ya que estaba dispuesta a gozar esa noche como nunca. Puso la cabeza de su verga en mi ano y empezó a empujar sin retroceder un milímetro. Casi me desmayo por la fuerza que utilizó, pero llegó a entrar todita. Enculada como estaba, el bombeaba como poseído y yo sentía que me partían en dos. Mis tetas se bamboleaban de un lado a otro por la fuerza de sus embestidas, y cuando mis ojos estaban blancos por el placer de esa tranca en mi ano, escuché una voz conocida que dijo, Clara. Mi amante no me soltaba, así que giré mi cabeza para ver quien me llamaba y era mi novio. Puta de mierda, me dijo y el que tenia mi culo ensartado le contestó, Si quieres gozar a esta puta entra de una vez. Mi novio entró donde estábamos y se quedó mirándonos un rato, mientras la verga de mi amante entraba y salía sin cesar. A pesar de la furia que veía en los ojos de mi novio, noté que su pene se le había parado seguramente por la escena que veía, así que lo jalé y le bajé la bragueta del ...
    ... pantalón, sacando su verga y la metí a mi boca. Se la comencé a chupar corriendosela con una mano, mientras sentí nuevamente un torrente de leche, pero esta vez se derramaba en mi recto. Cansado por las dos descargas que me había dado mi amante, le dijo a mi novio que ya había acabado y que me disfrutara si quería. Acto seguido se fue y nos dejo solos, así que le pedí a mi novio que me diera por el culo también. Sin salir de su asombro se puso detrás mío y sentí como me la enterró en el ano, bombeando con furia a la que creía su mansa novia. No creí que fueras tan puta me decía, y yo le respondí que si él quería podía ser su puta o con los que él quisiera. Saqué su verga de mi ano y empecé a mamarsela arrodillada, hasta que eyaculó en mi cara y yo lamía su leche metiendola en mi boca y tragándomela. Luego me llevó a mi casa cuando el sol ya rayaba, y me dijo que de ahora en adelante solo saldría con él y así se lo prometí, aunque a veces me doy unas escapadas para ver quien me levanta por ahí. 
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