Ana y el cierre del alquiler - Relatos Eróticos

Ana y el cierre del alquiler

Mi antiguo amigo Ricardo, el mecánico del barrio que había estado cogiéndose a mi esposa durante bastante tiempo, por fin había desaparecido, radicándose en Europa. Pero todavía quedaba el tema de su amigo Marcos, el carnicero…Anita de vez en cuando me hablaba de él, pero me juraba que ya no estaba tan caliente con ese tipo; desde la partida de Ricardo, tampoco había vuelto a frecuentar al carnicero; aunque yo estaba seguro de que ese tipo tan ordinario seguía con ganas de volver a cogérsela…En nuestra casa teníamos un departamento al fondo que podía ser alquilado. Un sábado por la tarde apareció por casa el famoso carnicero, con la excusa de que se había enterado del alquiler y le interesaba para un amigo suyo del interior…Yo tenía la certeza de que este turro iba a cogerse a mi mujercita otra vez; pero no tenía ganas de permitirlo. Así que le hice prometer a Anita que resistiría sus acercamientos todo lo que fuera posible. Ella me dijo que lo intentaría; pero que no me lo podía garantizar... la verga del carnicero era una tentación demasiado grande...muy, muy grande…Por las dudas instalé una pequeña cámara en el dormitorio del departamento; podía grabar durante varias horas seguidas mientras yo estaba en mi oficina. Estaba seguro de que tarde o temprano, mi dulce Ana iba a ceder ante la insistencia de Marcos…Una tarde llamé a Ana desde la oficina y me dijo muy contenta que ya casi tenía cerrado el alquiler del departamento: Me daría más detalles por la noche en casa. Al ...

... regresar encontré a Ana alegre y de buen humor, diciendo que ya tenía el departamento alquilado al amigo de Marcos; solo faltaba hacer unas pequeñas modificaciones para cerrar el trato…Mi esposa estaba demasiado alegre y relajada… eso me inquietó un poco.Después de la cena, Ana dijo que estaba agotada y se iba a la cama. Le respondí que me quedaría otro rato mirando televisión.En realidad quería saber si había sucedido algo fuera de lo común esa tarde durante mi ausencia.Conecté la cámara a la computadora para ver bajar el archivo y poder verlo.Finalmente encontré al futuro inquilino y a Marcos. Allí estaba el tipo, junto a un hombre más joven, de unos treinta años, a quien presentó a Ana como Juan Manuel.Pude ver que, mientras su amigo recorría el departamento del fondo, Marcos se quedaba junto a Anita. Fueron al dormitorio. De repente la abrazó por detrás y comenzó a meterle la mano por delante, por debajo de la falda. Me imaginé que le estaba acariciando la concha…Ana intentó debatirse, pero Marcos la sostenía con firmeza por la cintura, mientras sus dedos se perdían bajo la falda y entonces mi esposa se abandonó y comenzó a gemir con la respiración entrecortada…Le dijo que no podían hacerlo… que ella era una mujer casada…En un momento el tipo tironeó la falda de mi esposa y la hizo deslizar hasta el suelo, Luego, con un rápido manotazo, le arrancó también la pequeña tanga negra.Luego liberó de los pantalones su gruesa verga, que ya estaba totalmente erecta. La apoyó contra ...