Un gomero pichó ferozmente mi colita
Fecha: 01/08/2018,
Categorías:
Transexuales
Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues
... más…. Fabi> Un poquito, no te entusiasmés… Después te la doy cuando quieras… Tomé esa chota con mis manos y le dí un beso de despedida. Cuando me vestí, no me puse la tanga. Con cara de loba, se la entregué en sus manos como un trofeo. Era de noche. Salí por la puerta de atrás de la gomería para dirigirme a casa antes que llegara mamá del trabajo. Es una experiencia sexual inigualable. Chicas, le recomiendo que busquen a su gomero. Fabián y yo tuvimos varios encuentros en la gomería. La segunda vez que fui, encontré el local mucho más aseado. Ya habíamos quedado en una cita ahí. Esa tarde no fui al gimnasio, pero llevé mi bolso de mano. Fabián se estaba lavando cuando llegué. Mientras se lavaba fui donde estaba el sillón y encontré un colchoncito tendido en el piso cubierto con una sábana. Me escondí un poco de su vista, me vestí y maquillé para él. Cuando se acercó donde yo estaba… Lo dejé con la boca bien abierta…. Me puse un camisolín transparente bien cortito de color rojo, colales roja, can can ¾ rojo sostenido con portaligas… Fabi> Sos una mina!!! Y muy hermosa!!! Yo> Quería asegurarte que el macho de la gomería sos vos…. Te gusta como estoy? Fabi> Esta vez vas ver como te voy a culiar…. Con voz y gestos muy sensuales y provocando: Yo> A eso vine, y quiero asegurarme de eso también…. Me puso boca abajo sobre el colchón, y si quitarme ni una prenda, me cogió quedando arriba mío. Estaba pesado, pero que rico sentí todo ese cuerpo cargado de testosteronas arriba mío. A ...
... parte de su bestial toronja… Mis visitas a la gomería, despertaron la curiosidad de una vecina en frente. La chismosa desplazaba la cortina de su ventana para ver cada vez que yo entraba a la gomería a estar con Fabián. Que vieja turra!!! Algo había que hacer, porque si se enteraba mamá me echaba de casa. Tampoco quería soltar a Fabi. Como era verano entonces, acordamos que nos encontrásemos fuera de esa gomería. El tenía una moto grande, vieja y ruidosa. Y andaba muy bien. Fabián nunca me llevó a un hotel, pero en su moto íbamos a un descampado fuera de la ciudad cerca de un pequeño dique. En su moto transportaba una pequeña colchonetita. Yo lo esperaba a cinco cuadras de su local. Siempre vestida como tenia que estar, de mujer. Generalmente usaba minis con blusas y lógico, mi lencería. Me acuerdo una vez como cogimos los dos arriba de su moto. Yo tenia puesta una minifalda, y me coloqué parada adelante sobre los pedales apoya pies de la moto. La moto estaba bien apoyada sobre el suelo arriba de un caballete que traía. Fabián, alto de largas piernas, quedó parado tras de mí. Me metió su pija y yo me movía flexionando mis piernas teniendo una rica cogida. Estuvimos casi todo el verano así…. Incluso Fabián, día a día se empezó a arreglar más. Mediados de Febrero, nuestra relación empezó a fracasar. Él comenzó a frecuentar también a su ex pareja, con quien tenían una hija. Volvió a dejar a su ex mujer embarazada con quien comenzó a convivir después. Yo ya me empecé a dedicar al ...