1. Entrenador


    Fecha: 14/08/2018, Categorías: Sexo con Maduras Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues

    ... algo para beber?”, me pregunta relajado, como se nota que no soy la primera, pero voy a ser la primera que lo humille. “No, estoy bien”, le contesto, “¿Podemos hablar sobre mi asunto?”, pregunto a bocajarro. “Dilo con todas sus letras, no estás haciendo nada malo...todavía”, sonríe mientras me mira el coño. Me incomoda, el wey. Me siento desnuda. Puto perro. Ya verá. “¿Cómo puedo cambiar mi calificación, profe?”, pregunto suavecito, con tono de niña traviesa. “Te cambio tu calificación por una buena cogida” me dice sin cambiar su tono de voz, “tengo aquí las hojas, te cambio la calificación y le pongo cinta para que no se cambie, todo con tu presencia para que veas que va en serio”, me responde tan calmado que me toma por sorpresa, no me imagine que fuera tan directo. “¿Puedo estar segura de su discreción, profe?”, le pregunto esto como un comentario para no quedarme callada, para que no vea que estoy sorprendida, y también, un poco asustada. “No te voy a grabar, si es que eso piensas, tampoco me conviene”, me dice mientras noto que me saborea, “es un pacto entre dos adultos responsables de sus decisiones”. “Bueno”, empiezo a quitarme los tenis. “Espera, así no”, me interrumpe, “quiero primero que bailes mientras te desnudas y luego, pues te cojo”, frota sus manos lentamente. No había visto que eran tan grandes antes. “Ve al baño y ponte cómoda, cuando regreses te pongo musiquita y te mueves al ritmo, ¿qué tal?” me pregunta, “te espero aquí, sentado”. Si, ya me imagino que ...
    ... música vas a poner pinche naco. Tu puto reggeaton de marginado caliente. “No hace falta. Pon la música”, le contesto sin respeto alguno. Se ríe. Toma el control remoto y la música inicia. Unos acordes de guitarra, suaves, eróticos, largos llenan la habitación, conozco la canción, por supuesto, es Santana; Samba pa' ti. Voy al fondo de la sala, por primera vez veo la decoración, moderna y sencilla, que concuerda con la de alguien soltero. Camino lentamente hacia él, desabrocho mi chamarra que cae al suelo, mis pechos están algo hinchados, me encantan así, siento más, un pequeño roce me provoca esa corriente eléctrica desde mi pezón hasta mi cerebro. Muy rico. Se sienta en un sillón de piel con arcos. Ya frente a eĺ, subo mi top y salen mis pechos, mis pezones están duritos. ¿Qué me pasa? Me volteó, creo que estoy sonrojada, bajo el short, y por último la tanga. Mi culo queda frente a el. Siento la nalgada. Le busco la cara. “Sí, mami, me gusta tu culo”, me dice. La ropa queda en el suelo. Sólo traigo las calcetas. Me le acerco. Mi cuerpo no trae nada de grasa. Se me notan los musculos sin que sean de una deportista, mi coñito esta depilado, limpicieto. Listo para Ernesto, para que lo tenga rápido, fuerte y hasta el fondo. Se me antoja. Me estoy mojando. Se levanta y me abraza. Pinches brazotes. Nunca pensé que estuvieran así de fuertes. Respira mi cara, mi pecho, mi pancita, mi coñito. Electricidad, cada vez que su nariz roza mi cuerpo. Me atrae hacia él, abrazo su cintura con ...