1. Mi Madre


    Fecha: 18/11/2018, Categorías: Incesto Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... existe en el mundo…. - Mamá…jamás había sentido nada igual…..- dije yo embobada. - Lo se, mi vida – dijo ella sonriendo. Me soltó y se levantó. Vestía un pequeño camisón del que se despojó en un santiamén. Yo había visto a mi madre muchas veces desnuda y me parecía muy hermosa, pero hasta ese momento no la había visto desde el punto de vista que lo hacía ahora. En ese momento me parecía la fruta más apetecible que jamás había visto. Sus firmes pechos, con los pezones erectos, atraían mi mirada y se me “hacía la boca agua” al verlos. Su pubis dejaba entrever unos labios vaginales por los que entresalía un pequeño clítoris. La verdad es que su hermosura me extasiaba. Se tumbó desnuda a mi lado. Con gran delicadeza me quitó mis braguitas y al ver mi coñito tan cerca de su cara exclamo: - Mmmmmmmm………que preciosidad…- y depositó un beso al comienzo de mi rajita. Yo creí morir de gusto. Volvió a abrazarme y comenzó a besarme otra vez en la boca con gran pasión mientras metía su pierna entre las mías y comenzaba a frotar mi chochito con ella. - Hija, mi niña….eres tan apetitosa……- dijo a media voz en la que se notaba gran deseo. Llevó su mano derecha a mi entrepierna y empezó a masturbarme muy suavemente. - Ves, mi niña….hay que hacerlo así….despacito…con cuidado….sin apretar…. – mientras decía esto me estaba masturbando con gran maestría. Yo estaba tan caliente que enseguida empecé a retorcerme. - Ay mami, si….si….sigue así…..mamá…..que gusto me das……mmmm…..me voy a correr…. – ...
    ... decía yo. - No, mi vida, espera, no te corras todavía – y diciendo esto bajó su cabeza hasta mi chochito y me abrió los labios con las dos manos. Se quedó mirándolo como un niño que mira un pastel. - Mmmmmmmmmm………que delicia….hija mía, te voy a comer este maravilloso coñito….- decía casi relamiéndose. Yo nunca había hecho nada parecido, pero estaba visto que aquella noche yo aprendía una velocidad de vértigo. Mi instinto y el comportamiento de mi madre me habían puesto supercaliente. Mi madre empezó a pasar su lengua por mi rajita impúber y yo creí morir de gusto. La cosa duró pocos minutos porque me corrí enseguida retorciéndome como una anguila. Ella se esforzaba por mantener su boca pegada a mi chochito. Yo solté todo lo que llevaba dentro: - Siiiiiiiiiiii, asi!.........Siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii……………Mamiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii……………..chupa, chúpame, no pares, mamá, así……………………………ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh………!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!. Finalmente, me quedé totalmente relajada sintiendo unas contracciones en mi interior como no había sentido nunca hasta ese momento. Mi madre subió desde su posición hasta besarme tiernamente en la boca. Por primera vez noté el sabor del sexo de una mujer y era el mío propio y en la boca de mi madre, nada más ni nada menos. Yo estaba en el séptimo cielo y con una sonrisa de boba que le provocó una sonrisa a mi madre. - ¿Lo has pasado bien, mi amor? – me preguntó. - Mami, no tenía ni idea de que esto pudiera ser tan bueno…Uff…¡Que ...