1. Cogiendo con mi ahijada


    Fecha: 20/07/2018, Categorías: Incesto Anal Autor: Tonyzena67, Fuente: CuentoRelatos

    ... frente a mí con las piernas abiertas y le di y le di mientras nos caía agua caliente hasta que por primera vez siento como las paredes de su vientre se contraen, puedo sentir como me aprietan la verga, ella se apoya colgándose de mi cuello y solo exclama: ¡Que rico, Tony me estoy viniendo! Vi como su piel se erizaba y ella se retuerce mientras me da besos y cuya lengua se enreda con la mía y de esa manera llega ese relajamiento para ella. Yo sigo con mi verga parada y quiero que ella sienta lo caliente de mi esperma en su conchita. Llegamos de nuevo a la cama y la pongo de perrito. Que delicia es ver tener a una linda chica así. Nalgas jóvenes, atléticas, sin extrilla alguna, chocando contra mi verga y haciendo que mis huevos se mezan con placer. A mi edad, que en aquella época tenía 45, y con una buena corrida que me sacó Gisel minutos atrás, pues me toma más tiempo para poder llegar al orgasmo, y de esta manera veo como Gisel llega a su tercero y cuarto orgasmo. Para este tiempo Gisel ya ha asimilado el grosor y lo grande de mi verga, ya no se queja mucho. Son casi las cinco de la mañana y Gisel me pregunta: - ¿No te puedes ir? - Quiero darte placer, quiero sacarte todos los orgasmos posibles. - Me duele la cintura. Le había dado tanto de perrito, que ella está agotada en esa posición. Y luego me dijo: - ¡Quiero sentir que te vengas adentro de mí! La invite a cambiar de posición y ahora ella se subía sobre mí para cabalgarme. Que rico era ver a Gisel tomando posición para ...
    ... meterse mi verga. Yo comencé a taladrarla en aquella posición, hasta que nuevamente ella tomó el ritmo después de atarse su cabello con una liga y sostenerse los pechos que se sacudían con el movimiento violento de mi embestida. De nuevo, aquello le llevó a otro orgasmo a Gisel, y sus jadeos, su expresión gozando la magia del sexo, hicieron que yo explotara con mi segunda eyaculación. Gisel solo volvió a exclamar: ¡Que rico, que rico sentir eso calientito! Se levantó después de algunos minutos sentándose frente a mí y pude ver como mi esperma abundante salía de la conchita rica de Gisel. Debo decir que hasta el día de hoy de vez en cuando cogemos con Gisel. Al día, ella tiene 25 años, y sigue estudiando una maestría, aunque ahora también trabaja. No sé si tiene novio, regularmente nunca hablamos de ello. Como sabe que vivo solo, que no pienso en casarme, de repente me llama y me pregunta: ¿Tienes tiempo para Gisel? – y sé que ella quiere sexo. Quizá tenemos esos encuentros 4 veces al año, pero realmente el sexo con Gisel es delicioso. Ahora ya con mucha más experiencia, sabe dar un mejor placer oral, y ahora hasta me complace dándome su rico culo. Siempre le he preguntado el por qué una chica linda como ella se envuelve con una persona mayor como yo. Y no sé si por cumplido me dice que le parezco un hombre guapo, que al verme en ropa de baño en la piscina se imaginó lo potente de mi paquete, y que por mi edad no se podía equivocar que podría encontrar ese placer que imaginó ...