El macho de la casa (3)
Fecha: 18/12/2018,
Categorías:
Incesto
Autor: wendy1988, Fuente: SexoSinTabues
... mujer. Ella subió por delante, en la misma escalera se levantaba la falda para que yo fuera viendo su precioso traserito descalzonado. Esta perrita de veras que era muy putilla y caliente. En cuanto entramos a la recamara me eché sobre la cama y me bajé el short diciéndole que se montara arriba de mí y se metiera toda la verga en su cosita. Cuando me vio el camote dudó un poco, su cara lo decía todo: cómo era posible que semejante barbaridad le pudiera entrar en su pequeñez?!. Cuando se lo metí en la lavandería ni lo vio, por lo que no tuvo tiempo de razonar, de analizar las proporciones como yo, cuando la tenía empinada sobre el lavadero y veía en primer plano tan desigual invasión. –Ándale mi hijita!, no tenemos tiempo, búllele!, le dije impaciente y sin dejar de sóbramela, sintiendo cierta sensación perversa al ver su mueca de miedo, zarandeándomela desde la base, enseñándosela completa, asustándola apropósito. Ella con la falda a la cintura y a los pies de la cama no se decidía, su lógica juvenil le dictaba que no era posible que algo así le cupiera. Era imposible!, le decía su cerebrito calenturiento. -Hay cuñis, la tienes enooorrrrme de grande!, me da miedo... -Nombre chiquita, no tengas miedo, ya te la metí toda allá abajo, ven... ven que te la voy a dar rico, como hace ratito. -Y si me lastimas, la tienes bien gordota y dura, mira cómo se te ve! -Cómo? -Muy así... muy grandísima, muy gruesa. No me va a caber en mi pipi. Me va a doler mucho, mejor te la chupo mucho, ...
... si?, me dijo pasándose los dedos por la vaginita y con carita de caliente, mirando fijamente mi verga masturbada muy lentamente por mí. -Me la quieres chupar mucho? -Sí, mucho muchos muchoss, te la quiero mamar mucho. -Por qué?, no que te asusta. Porqué me la quieres mamar?, dime. -Porque la tienes muy buena y muy rica. Me encanta cómo se te pone. -Qué es lo que más te gusta? -Toda. Me gusta toda, la tienes súper. -Pero más más?, que es lo que más te gusta, la cabezota?, mira cómo se me vé. -Sí, la cabezota. Parece un corazón al revés, mira cómo se hincha! Ándale déjame chupártela mucho, luego me dejo que me la metas. -No hay tiempo, mira, tráete ese bote de aceite ménem y úntame la vergota, ándale apúrate. Con sus blancas manitas me empapó la verga desde la base hasta la cabezota, con esto mi barrote alcanzó casi las 9 pulgadas. Ella también disfrutaba mucho de esta nueva caricia, con su boquita abierta me masturbaba con las dos manos, de arriba abajo y de abajo para arriba, muy lento viendo somnolienta, de lo caliente que se ponía, como me brillaba poderoso y grosero el vergona, cabezón y venoso, musculoso y fuerte. Cuando volvió a ponerse aceite en las manos y lo esparció sobre mi fierro, me enderecé y le metí la lengua en la boca, sin dejar de besarla la recosté boca arriba en la cama, donde yo había estado antes, le subí las enaguas y me coloqué entre sus piernas moviendo bien mi lengua para que no se me asustara. Dejé su boca y bajé por su cuello mientras subía su blusa ...