1. Hice que mi madre cumpliera todas mis fantasías


    Fecha: 20/10/2017, Categorías: Incesto Grandes Series, Autor: voyeur34, Fuente: CuentoRelatos

    Hola, mi nombre es Adrián y esta historia que voy a contarles sucedió cuando tenía entre los 18 y 19 años de edad. Aunque, en realidad, sin que yo lo supiera, había comenzado mucho tiempo atrás. Eso lo descubrí más adelante, cuando ya habían pasado muchas cosas que después les contaré. Pero no deseo adelantarme. Todo a su tiempo. Quisiera comentar que en ese tiempo, ya hacían más o menos dos años que mis padres se habían divorciado, por lo que yo vivía solo en casa con mi madre. A quien quiero describirles. Ella por esa época rondaba los 39 años. Nuestra familia tiene ascendencia norteña, por lo que mi madre es de piel blanca, adornada de hermosas pecas –no muchas- en la espalda y su rostro. Las suficientes para parecer extremadamente sensual. Sus ojos eran claros, de ese café que casi roza al color miel. Y su cabello era largo, a media espalda. Lo suficiente. Aunque mi madre era abogada y ama de casa, tenía tiempo, no sé cómo le hacía, para mantenerse en forma. No era exuberante, sino más bien de esas mujeres que por naturaleza están bien formadas, busto generoso, piernas firmes largas, gruesas sin llegar a ser gordas, que culminaban en un trasero respingado, de nalgas redondas y de un tamaño perfecto. Era la típica madre sexy aunque no fuera una súper modelo. Ya me entenderán. Se llama Monique. No sé por qué mis abuelos eligieron ese nombre pero a mí me encantaba. Era abogada. Ya se imaginaran como traía a sus jefes y a sus clientes. Por lo mismo de su profesión, mi madre ...
    ... solía vestir de forma elegante, ya saben, saco de oficina, blusa blanca o azul con el botón del escote abierto, y falda ejecutiva arriba de la rodilla, ceñida a ese hermoso trasero que ostentaba. La verdad para ser honesto, no sé si por su profesión y los celos de mi padre, o por qué él mismo engañó a mi madre fue que comenzaron a tener problemas, con el tiempo la relación se hizo insostenible, agravada por los episodios alcohólicos de mi padre, pero el caso es que mis padres tuvieron que separarse. La verdad yo era un niño prácticamente cuando todo empezó así que no supe mucho. Además mis padres al menos en eso fueron cuidadosos conmigo. Pero esta introducción aunque necesaria, no creo que les interese mucho. Por eso pasaré a lo que nos importa a todos aquí. Justamente a causa de esas ocasiones desagradables en las que mi madre discutía con mi padre y la cercanía del divorcio, fue que mi madre a veces terminaba durmiendo en mi habitación, tratando de huir de mi padre o de simplemente dormir tranquila. Les hablo como de unos dos años antes de la separación definitiva. Yo tendría como unos 16 o 17 años, y en ese tiempo como sabrán ya comenzaba con mis necesidades y mi despertar sexual. Entonces comprenderán que aquellas llegadas furtivas de mi madre a mi cama, no solo eran consoladoras para ella, sino inquietantes para mí, que era un adolescente que comenzaba a mirar a las mujeres y niñas de mi edad de una forma menos infantil. En la escuela ya todo mundo hablaba de relaciones, ...
«1234...7»