La pequeña Emily
Fecha: 15/05/2019,
Categorías:
Incesto
Autor: arteomx, Fuente: SexoSinTabues
... soy su tío-novio. Después de un breve momento de tocar suavemente mi pene, decidió quitar por completo la sábana y bajar un poco mi pants, cosa que yo le facilité levantando ligera y disimuladamente la cadera, para que no tuviera que lidiar con mi peso. -¡La tiene más grande que mi tío Javier y que Luis! –Dijo Montse sorprendida –Mejor déjamela a mí. Yo la quiero -No. –Contestó Emily. –Tú tienes dos y yo no tengo ninguna. Mi tío Teo es mi novio y su cosa es para mí. Para ese momento, me mataba la curiosidad por ver la cara que ponían en su caliente travesura. Me imaginaba que eran expresiones de lujuria, sorpresa e incertidumbre, pero no podía abrir los ojos, pues seguramente me estaban vigilando a que no despertara y el sol comenzaba a iluminar la sala. Con la verga de fuera y sin estorbo alguno, ya la sangre circulaba bien y la tenía parada y dura al máximo ante las deliciosas caricias de Emily y una que otra lamida de Montse que no se quería quedar atrás. En ese momento, claramente sentí brotar una buena cantidad de líquido pre seminal, a lo que Montse urgió a Emily a probar. -Mételo en tu boca, el juguito sabe muy rico. Sin esperar un segundo, Emily posó suavemente su lengua en la punta del glande y saboreó el líquido, y sin pensarlo, engulló lo más que pudo de mi trozo de carne. En segundos comenzó un entrar y salir entre mi pene y su boca. Usaba torpemente la lengua y en dos o tres ocasiones sus dientes rozaron provocándome un ligero pero rico dolorcillo. Pasados unos ...
... cinco minutos, y tras escuchar un ruido en el patio, Emily decidió dejar su faena. -Ya vámonos. Nos pueden regañar. –Dijo. -No nos regañan si nadie sabe lo que hicimos. Yo no le voy a decir a nadie, así que tú tampoco lo digas. -Yo tampoco le diré a nadie lo que hicieron. –Susurré para que no se asustaran. –Será un secreto entre los tres. La cara de espanto que pusieron las dos niñas me gustó mucho. No podían negar nada, pues yo con la verga de fuera y Emily con su mano en ella era una fuerte evidencia de que se portaban mal, pero mi promesa de no decir nada las medio tranquilizó. -Si me prometen que seguiremos jugando al rato los tres, yo me voy a portar bien con ustedes y la vamos a pasar muy bien. ¿Qué les parece? -Yo si quiero jugar contigo, mi amor. –Dijo Emily (Siempre me dice “Mi amor”) -Yo quiero jugar así con mi primo Luis, pero a él nunca se le para cuando lo agarro borracho. –Contestó Montse. -Es que tu primo Luis apenas tiene tres o cuatro años más que tu, y como joven y rebelde que es, nunca se mide cuando toma, aunque sabe que no debe hacerlo. Se pone más borracho que cualquier persona grande y por eso su cuerpo no responde. Al rato en el bosque jugamos los tres y verán qué maravillas se pueden hacer con nuestras cositas. En la familia, siempre ha habido incesto, aunque nadie lo ha aceptado abiertamente. Yo he cogido con mi hermana Vero, mamá de Montse y con mi prima Isabel, mamá de Emily. Durante todas las reuniones, he notado ciertas miradas entre unos y otros ...