1. Dario, el de rugby


    Fecha: 06/06/2019, Categorías: Gays Tus Relatos Autor: Alexxx, Fuente: RelatosEroticos-Gratis

    ... Te lo explicaría pero no lo entiendo ni yo". 
    
    El me hechó una mirada desconfiada y sonrió de manera traviesa. "Seguro que no te van los tíos tanto? Porque antes me estabas mirando a mi, no a la chica que tenía encima". 
    
    Me volví rojo y empezé a tartamudear, "no, es que, yo, no...," paré en cuanto me hizo un gesto con la mano derecha. Se la puso encima del pantalón y se frotó la verga por encima mientras me sonreía. La tenía dura el tío... Y eso me calentó muchísimo. Se veía la forma y el tamaño perfectamente, y era enorme y gruesa. 
    
    El paro de caminar cuando íbamos por una calle vacía. Me agarro por la cadera y me pudo contra una pared. No lo hizo bruscamente. Se me acercó hasta que tenía su cara a centímetros de la mía. Seguía oliendo a cerveza, pero también a sudor. Y yo ya no me podía contener. "Mira tío, la chica me ha clanetado bastante y como parece que te gusta lo que ves... Podrías ayudarme con eso no"? No supe responder en ese momento y se me acercó al oído, y cuando habló sentí su aliento en mi oreja y mi cuello, y su voz grave me dio hasta escalofríos. "Dejame ponértelo fácil. Quieres venir a mi casa y mamarmela? Solo dime que si y no vamos. No le diré nada a nadie". 
    
    "Si". No podía haber dicho nada más, yo ya había perdido el control. Y ahora el tenía completo control sobre mí. Los dos sabíamos que yo haría lo que él me pidiese. 
    
    En cuento llegamos a su apartamento, entramos al portal y el ni se molestó en subir arriba, nos quedamos en las ...
    ... escaleras, donde me agarró por detrás y apretó su cadera contra la mía. Sentí su polla apollarse en mi culo, y me empezó a volver loco. Me dio la vuelta y me apretó contra el. Podía sentir sus músculos. Estaba muy musculado, y le agarré la cremallera de la chaqueta, sabiendo que no llevaba nada debajo. Pero antes de bajarla, Le miré a los ojos. El me sonrió una vez más. "Adelante". Se la abrí, revelando un cuerpo que casi me hizo correrme. Tenía todo el pecho peludo y estaba sudado. Podía olerlo y me encantaba. Me agarro de la cabeza y me apretó contra su adomen, "lame putita". Segui sus órdenes. Y me encantó. Me dominaba el sabor y el olor y ser su puta me encantaba. 
    
    Pero no duró. Porque enseguida me agarró de los hombros y me bajó a nivel de su cadera. Aún se le notaba la polla dura. Y parecía que iba a reventar el pantalón. Se bajó la cremallera y el musculo gigante salto y acabó colgando delante de mi cabeza. Media unos 20cm y estaba casi goteando con precum. También era ancha, tanto que no sabía si me cabría en la boca. Y entonces caí, Dario no llevaba ropa interior. No se como era posible pero me calentó aún más, y mi polla empezó a cubrir mis boxers de precum.
    
    Primero solo me la apolló en los labios, y aun ye no había abierto la boca, el sabor me consumia. El olor también era único. Me encantaba su polla. Tenía una mata de vello púbico en la base enorme, y aún así, no había visto una más grande. Con una mano agarró la base de su polla, y con la otra la parte de atrás de ...