Visitando el rancho de tío Víctor (3) - Relatos Eróticos

Visitando el rancho de tío Víctor (3)

Por la mañana me desperté, me senté en la cama y pude ver que aun seguida desnudo, mi cuerpo se estremeció y recordé lo que había hecho con mi tío en la noche. Mi pene se puso duro, de alguna manera, me había gustado todo lo que hicimos….
Vi a mi alrededor y mi tío no estaba, me levante de la cama para ver donde podía estar, me dirigí a la cocina, el estaba sentado en el comedor desayunando, desnudo, solo tenía un bóxer rojo ajustado, que lo hacía lucir muy sexi y muy lindo (sus grandes y fuertes brazos, unas piernas bien formadas y duras, un pecho grande y un abdomen plano, su bello rostro uff, mi tío era un dios caído del Olimpo)…

Tío Víctor: ¡buenos días Luisito! ¿Dormiste bien? ¿Cómo amaneciste hoy?

Yo: ¡buenos días tío! Si dormí muy bien…

Tío Víctor: siéntate vamos a desayunar.

Yo: si, me puedes dar un poco de cereal con leche. Como me da mi mami.

Tío Víctor: claro campeón, para ti lo que quieras.

Mi tío me sirvió un poco de cereal, desayunamos juntos viendo el televisor y no conversamos nada de lo ocurrido en la noche. Terminamos de desayunar, tío se levanto del comedor, se dirigió a su habitación y empezó hacer sus ejercicios, ahora entendía porque tenía ese buen cuerpo. Cuando finalizo con sus ejercicios me pido que fuera por un vaso de agua fría, el cual lo complací inmediatamente, tome un vaso abrí el refrigerador y tome el agua y se lo di a mi tío. El estaba muy sudado y dijo que se tenía que dar una ducha y se dirigió al baño. 

Mientras ...

... tanto yo me quede esperando a que saliera para que me diera mi ropa y me pudiera cambiar, ya que dentro de un rato más mi papa vendría por mí y me llevaría a casa, mi tío tuvo que salir del baño completamente desnudo y todo mojado ya que se olvido de meter su toalla, mis ojos se abrieron mas y quede hipnotizado nuevamente, un cuerpo divino (por eso nunca se le iba una chica)… yo no perdía de vista el cuerpo de mi tío y el se dio cuenta.

Tío Víctor: ¿te pasa algo Luisito? ¿Quieres decirme algo?

Yo: eh, no tío. ¿Por qué?

Tío Víctor: pues, como no me quitas la vista de enzima, pensé que querrías decirme algo.

Me sonroje un poco y dirigí mi mirada hacia otro lado, mientras mi tío terminaba de secarse, nuevamente mi mirada se centro en su cuerpo y pude ver como se secaba la cabeza, los brazos el pecho, las piernas etc. mi pene se puso duro, y por estar emocionado pon el cuerpo de mi tío, me olvide que estaba desnudo. Por otro lado mi tío se dio cuenta que me gustaba verle desnudo… y se dirigió a mí se sentó en la cama y me dio la toalla…

Tío Víctor: puedes ayudarme, secarme el cabello por favor.

Yo: me levante de la cama, tome la toalla, me puse frente a él y empecé a secarle la cara y el cabello.

Mi tío puso su mano derecha en mi pene y comenzó a masturbarme eso me gustaba, yo me había quedado quieto, me olvide de seguirle secando, solo cerré mis ojos y me deje llevar, pude sentir como unió sus labios a los míos y medio un beso, yo trataba de imitarlo, pero lo ...