Inicio de una nueva aventura - Relatos Eróticos

Inicio de una nueva aventura

... poniendo principal atención en sus tetas y aun besándola, se giró para quedar frente a frente y comenzó a masturbarme, comenzó a bajar sus besos a mi cuello, hombros, pecho y abdomen hasta que finalmente puso mi verga en su boca y comenzó a mamar deliciosamente, después de unos momentos así, le pedí recostarnos en la cama para hacer un 69, así lo hizo y estuvimos unos minutos más de esa manera, ambos estábamos muy tomados y calientes, cambiamos de posición una y otra vez, la estábamos pasando como pocas veces, con la calentura de los primeros encuentros, después que eyacule por segunda vez, nos quedamos un momento recostados boca arriba, cansados, tomando un poco de aire para bañarnos y dormirnos cuando tocaron a la puerta, que pasó dije yo, aun sin poder recuperar la voz al 100%, no se asusten soy yo –dijo Liz, puedo pasar? Espérate tantito contestó Ale mientras jalaba la sabana para taparnos, adelante, que pasó? Entró Liz en un shortcito y una blusa de tirantes que la hacían verse muy bien, oigan que barbaros, yo no pensaba que fuera para tanto, se escuchan en toda la colonia, o lo hacen para presumirme, los tres reímos, yo le contesté, no tenemos porque, ahí está Hugo que también le encanta, igual puedes preguntarle (Hugo es su hermano), se rio y dijo, no, pero como crees, él no es como ustedes dos, apenas iba yo a decirle y como lo sabes si no le preguntas, cuando a Ale se le ocurrió preguntarle algo mucho más interesante, saco su brazo de debajo de la sabana poniendo ...

... su mano sobre mi verga y le preguntó, y tu si eres como nosotros? Liz dejo de reír y dijo, no, yo tampoco, y entonces porque dudaste y te salió la voz como cortada le contestó Ale, además como que te salió del alma decir él no es como ustedes en lugar de decir nosotros no somos así, contestó Liz, tal vez si yo estuviera muy borracha, y con muchas, muchas ganas me animaría a hacer algo con él, pero quien sabe cómo reaccione, me daría miedo que piense que soy una loca o algo así, los he estado viendo desde el antro y aquí y luego escuchándolos hace rato, y se ve que se la pasan muy bien, y aunque pienso que cada quien su vida pues también sé que no es normal y para nada está bien Ale la interrumpió y dijo, ¿y si te ayudamos? Pero se lo dijo desde el corazón con una sonrisa y emocionada, tanto que mientras decía se enderezó y levantó de la cama aventando la sabana y dejándonos desnudos frente a Liz, yo inmediatamente me cubrí con la mano y me enderece para tomar nuevamente la sabana, Liz me miró y me dijo, tendrás que ofrecerme soborno de nuevo para que no diga nada, ya hombre no te preocupes no soy tan persinada tampoco, Ale se puso frente a ella y dijo, ya dejen eso, en serio quieres que te ayudemos con Hugo, ahorita mismo tengo una idea super, Liz no contestó pero Ale no espero respuesta, salió corriendo del cuarto y regreso muy rápido con la botella de vodka y su short y blusa de dormir, entro a la recamara y le dijo a Liz si o no pero decídete ya, pero que vamos a hacer? ...