Mi alumno de la facultad.
Fecha: 16/01/2018,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues
... Roce suavemente su verga con la panti. Lo vi temblar, lo roce varias veces y la envolví suavemente. Lo masturbe lento. Quería tomar mi cabeza pero lo rechace. Su verga se mojo de líquido preseminal que limpie con mi prenda, y lo probe. ¡Su sabor era suave, saladito! Sin pensar más la meti en mi boca. Primero su glande, chupando y lamiendo sólo su glande, acaricie su pecho, su abdomen duro con esos cuadritos que me vuelven loca. Me recarge en la pared y abrí mi boca mucho, quería que se metiera hasta mi garganta, jale su cuerpo, también se recargo y me cogía mi boquita. Mis manos pasaron de su cuerpo a mis tetas. Inicio un lento mete-saca. Estaba escurriendo. Sostuve sus nalgas y me la meti todo lo que pude. ¡Su-pu-ta-ma-dre! ¡No me cabía toda! Mientras se la chupaba, mis manos lo masturbaban. Abrí su pantalón y baje su trusa. Estaba rasurado. Acaricie sus huevos y los chupe después. Se quería venir, así que detuve las caricias. Le quite toda la ropa y le dije que ya venía su examen, que aguantara. Que mientras se pusiera un condón. Me volteé y me quite la falda y las zapatillas. Oí que su celular hacía sonidos. ¡Estaba grabando el marica! Me calentó todavía más. Me imagine a cientos de tipos viéndome el culo lleno de una verga joven. Todos deseando estar como él: con su maestra, con su puta maestra casada, su bien caliente y muy mojada maestra. Pero solamente iban a poder ver mis nalgas y culo. Nadie más que yo y él sabrían de esta aventura. Puse mi cabello sobre mi hombro y ...
... volteé. Lo encontré sentado sobre el catre acomodando el teléfono. Salte sobre él. Se acomodo y busque su verga, la dirigí a mi coñito y me la trague todita. ¡Me cupo casi toda! Me sentí tan llena, como nunca. Acaricié su pecho con mis manos, jalando sus pezones que se pusieron bien duritos, los bese. Y sentí como su verga se endureció más. No pude evitar suspiros por su entrada, sus manos sujetaron mi cadera sin atreverse a hacerlo con fuerza. Fueron caricias sobre mis piernas y caderas, temeroso, emocionado. Le susurré si le gustaba el sexo, me susurro que le encantaba. Le dije que este era su examen, que tenía que hacerlo bien y moví mis caderas. Arriba y abajo, poniendo mi culo frente a teléfono para que lo vieran. ¡Que bárbaro! Golpeaba mi punto G sin ningún esfuerzo, con su vergota, gorda y larga. , con esa venota enmedio, y su glande sabroso. Le pregunte si queria pasar mi materia trabajará duro, y aprete su verga y la solte suave, fuerte, arriba y abajo, suspire otra vez, volvío a pegar ahí, y otra vez me estremeció. Ahí estaba yo. Dentro de una de las universidades más caras del país, con una verga entrando hasta el fondo de mi. Otra vez golpeaba ahí, donde me gusta. Me recoste sobre él para que entrará y golperará más fuerte. El tonto solo sujetaba mis nalgas. Yo esperaba que fuese más atrevido pero en vista de su falta de creatividad, decidí seguir encima. Y en esa calentura se lo dije: que la estaba pasando muy rico y que me gustaba su cuerpo, que fantaseaba con ...