Relatos Íntimos de chicas bien jamás contados - Relatos Eróticos

Relatos Íntimos de chicas bien jamás contados

... avalancha la cual no puedes controlar, ya estaba en eso y como por arte de magia me estaba excitando. Mi Tía conservaba aun su buen cuerpo y sus mañas ya que tenía mucha experiencia en tríos, porque mientras estaba ocupada en dicha pose, es cuando empecé a sentir un fierro mega frio y es cuando me doy cuenta que me estaba ensartando un plug lubricado de forma de corazón. Es cuando mi Tío hace un espacio y de la nada siento la mano de mi tía en mi cabeza agachándome para que viera en el espejo (uno que puso en el suelo) para que viera como ya estaba ensartado entre mis nalgas dicho plug. Solo de verlo ya estaba mi vulva lubricando de la nada. Me decía de donde carajos sentía placer, si sentí inicialmente dolor intenso en el ano!!!

La verdad no recuerdo que decían, solo me enfocaba en no ahogarme en aquella felación, pero sentía algo incómodo estar penetrada por un fierro frio clavado en el ano y a su vez caliente por el lubricante.

De la nada como si fuera aquellos peluches que juegan los niños, me lanza mi To con fuerza hacia mi cama, me abre las piernas y así estuvo bastante tiempo chupándome la vulva, jugando con ella y penetrándome con los dedos como si se tratara de un juguete. No puedo negar que sentía demasiado esquicito, era lo máximo y la verdad ya ni con mi propio novio. La penetración fue épica, fue mega salvaje, a tal grado que la cama rechinaba horrible y cambio de posición haciéndose de lado, se escuchaban las penetraciones y ese clásico sonido ...

... "pac-pac-pac-pac-chac-chac-chac-chac” de las penetraciones vaginales, mis piernas volando de un lado y del otro como si fuera de trapo a tal grado que antes traía puestos los tacones y quedaron de un lado y del otro de la cama, la verdad no tenía mucho control sobre mi cuerpo ya que estaba siendo sacudida por lo mismo y la piel ya la tenía aperlada de sudor lo mismo mi Tío y es cuando de la nada se hizo una “conexión” mágica entre ambos. Yo trataba de taparme los pezones con las manos por acto reflejo de las sacudidas de las que estaba siendo sometida, pero de vez en cuando solo veía las manos de mi Tía que me las quitaba, mis senos volaban de un lado hacia el otro quedando expuestos para de vez en vez los chuparan ambos, hasta que ella puso su vulva en mi cara y es cuando por reflejo empecé a chuparle el sexo. Me saque de onda, no supe si era mi niña gay interna que se expresó en ese evento, me saque de onda ya que no sabía si la Tía era lesbiana o qué onda!¡ Era un descontrol total. Por primera vez gemía como una desquiciada a tal grado que empecé a sentir una especie de “envidia” hacia mi Tía por el tipo de hombre rudo que tenía. La cosa no termino ahí, fue cuando eyaculó y pensando que ya se había terminado aquella cosa del sexo, pero estaba equivocada, me pusieron en cuatro, ofreciéndole la cola al aire y es cuando empezaron las penetraciones anales!!! Fue una pose extraña, ya las había visto en anteriores revistas, pero llevarlas a cabo en la intimidad me fue de morbo mayúsculo, el ...