La perversión me sedujo 19 - Relatos Eróticos

La perversión me sedujo 19

... perros en celo, nos ha quedado claro todo. –dijo Carolina.

–Es verdad, más cerdos y guarros no pueden ser estos esclavos. –dijo Sara,

Se habían cansado de darles latigazos con sus correas, así que tiraron sus correas de las que llevaban en sus cuellos, mientras abrían sus piernas para acercarles sus coños, comenzando a mearles dentro de su boca.

–¡Aaah, Aaah, Aaah! –gemían ellas. –¡Mmm, Mmm, Mmm! –gemían ellas.

–¡Qué placer es mearles en sus bocas! –dijo Sara.

–¡Toda una pasada! –dijo Nadia.

Los esclavos se tragaban toda la orina, para dejar parte y mearles en sus caras y por encima de sus cabeza y cuerpo.

–¡Comenzad a lamernos nuestros coños, esclavos! –ordenó Carolina.

–Si, mi Ama Carolina. –respondieron los esclavos, comenzando a lamerles y a chuparles sus coños con sus lenguas, dándoles placer.

Mientras que Olga, lo grababa en vídeo y tomaba fotos de las perversiones, pero le entró ganas de mear, así que fue y se puso a mearles encima de sus cabezas, cuerpo y en sus caras, repartiéndoles su orina a partes iguales como mejor pudo. –¡Aaah, Aaah, Aaah! –gimió de placer Olga.

–Si, es una gozada y muy morboso. –dijo Olga.

–No lo habíamos hecho nunca, pero ahora entiendo porque esas tres hacen estas cosas. –dijo Carolina.

–Dais pena, los tres si os gusta que os traten así de esta manera, esclavos. –dijo Carolina, riéndose de placer.

–Nos encanta la verdad. –dijo Nadia.

Comenzaron a gemir de placer, mientras los tres esclavos les lamían ...

... y les chupaban sus vaginas, mientras que ellas, con la correa les daban latigazos en sus culos y espaldas, gimiendo de dolor y de placer al sentirlos en su piel. –¡Aaah, Aaah, Aaah! –gemían de dolor. –¡Mmm, Mmm, Mmm! –gemían de placer. –¡Aaah, Aaah, Aaah! –gemían de dolor. –¡Mmm, Mmm, Mmm! –gemían de placer.

Ellas, gemían de placer, pero atizaban con más fuerza los latigazos, dejándoles las marcas en sus cuerpos, gimiendo de dolor y de placer, porque cada vez, les gustaba más, sintiéndose muy cachondos perdidos y excitados, soltando sus líquidos preseminales en el suelo.

–Mirad los esclavos, están soltando líquidos por las pollas. –dijo Olga, que estaba grabándolo todo, riéndose con sorpresa que eso les provocara tanto placer.

–O sea, que os gusta, cerdos. –dijo Sara, gimiendo de placer.

–Putos degenerados de mierda. –dijo Nadia, comenzando a correrse de placer, mientras su esclavo lamía y chupaba, tragándose sus fluidos vaginales.

–¡Aaah, Aaah, Aaah! –gemía Carolina, corriéndose en la boca de su esclavo, mientras que este se lo tragaba todo.

Las tres se corrieron en sus bocas, haciendo que se lo tragaran y limpiaran todo con sus lenguas, mientras les daban latigazos en sus culos junto a sus espaldas. –¡Aaah, Aaah, Aaah! –gemían de dolor. –¡Mmm, Mmm, Mmm! –gemían de placer. –¡Aaah, Aaah, Aaah! –gemían de dolor. –¡Mmm, Mmm, Mmm! –gemían de placer.

Estuvieron un rato hasta que les limpiaron muy bien sus vaginas, para tirar de sus correas para ponerse a sus ...