1. Incesto en la casa rural


    Fecha: 30/05/2024, Categorías: Incesto Autor: Quique, Fuente: TodoRelatos

    ... los zapatos marrones y se sentó al lado de su prima.
    
    Raquel le puso las manos encima de la polla, que ya estaba empalmada, y la acarició, luego le quitó los calzoncillos y la polla y los huevos quedaron en libertad. Le acarició los huevos con la mano izquierda y lo masturbó con la mano derecha. Luego se inclinó, sacó la lengua y le lentamente le lamió el glande, lo lamió unas veinte veces, después lo metió en la boca y también lentamente, se lo mamó un par de minutos. Paró de mamar cuando sintió como la boca se le llenaba de leche, y fue para tragarla. Al acabar de tragar, se quitó el short y las bragas, apoyó la espalda en la cabecera de la cama, flexionó las rodillas y le dijo:
    
    -Ponte enfrente de mí que te voy a mostrar como es un coño.
    
    Se puso. Raquel separó las piernas. Con tres dedos de cada mano abrió el coño y le dijo:
    
    -Los de los lados son los labios vaginales, el agujero es la vagina, o sea, por donde me la metiste anoche, y la protuberancia de arriba es el clítoris.
    
    -Tengo oído hablar de él. ¿Y eso que parecen babas, que son?
    
    -Son los jugos que lubrican la vagina de una mujer cuando está caliente. ¿Qué te parece mi coño?
    
    -Una obra de arte.
    
    -Mete un dedo dentro de la vagina.
    
    Le metió el dedo corazón de la mano derecha. La vagina se cerró y Jacobo se sorprendió.
    
    -¡Me lo acaba de apretar!
    
    -Quiere que lo metas y lo saques.
    
    Metió y sacó el dedo.
    
    -Está resbaloso.
    
    -Son los jugos. Cuando lo vayas a sacar, presiona la parte de ...
    ... arriba con la yema del dedo y luego encógelo a medida que lo vas sacando. -con un dedo, le mostro como hacerlo- Así es como lo debes sacar, acariciando el punto G.
    
    -¿Qué es el punto G?
    
    -Es un lugar que... Es el punto del gusto.
    
    -Pillado.
    
    Poco después, le dijo:
    
    -Acaricia ahora el clítoris con la lengua.
    
    Se lo lamió y Raquel comenzó a gemir. Jacobo le preguntó:
    
    -¿Te dolió?
    
    -No.
    
    Siguió acariciando. Al rato, Raquel, le dijo:
    
    -Fóllame ahora el coño con dos dedos.
    
    -¿Por qué no te meto la polla?
    
    -Porque para hacerle una paja a una mujer no se le mete la polla.
    
    Jacobo puso cara de asombro.
    
    -¡¿Te estoy haciendo una paja?!
    
    -Estás, sigue.
    
    Le folló el coño con los dos dedos como le había enseñado y le lamió el clítoris
    
    -Así, así, así, así, sigue, sigue, sigue, sique, sigue. Lame el clítoris más rápido y fóllame el coño más aprisa. Así, así, sí, así... ¡Me corro, me corro, me corro, me corro!
    
    Jacobo vio como se sacudía, y oyó como gemía. Su polla latió como el corazón de un caballo desbocado y vomitó aguadilla.
    
    Al acabar de disfrutar, le dijo:
    
    -¡Qué maravilla ha sido ver como te corrías!
    
    -¿Quieres ver como me corro otra vez?
    
    -Quiero.
    
    -Échate boca arriba.
    
    Se echó, luego, Raquel, se puso a horcajadas sobre él, se sentó y deslizó la polla entre sus labios mojados, después, con parte de la polla aprisionada entre los labios, vaginales, la cogió con su mano derecha y lo masturbó. Tiempo más tarde, al empezar a correrse llevó la ...
«12...456...11»