1. Venganza (I)


    Fecha: 13/06/2024, Categorías: Sexo en Grupo Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... follársela a lo perrito sin compasión, hasta el fondo y cogiendo del culo. Yo aproveché para ponerme delante de ella y meterle la polla en la boca. No hacía falta follarle la boca, con las embestidas del chico ya me la estaba chupando. Uno tras otro se la fueron follando a cuatro patas, mientras yo no se la sacaba de la boca hasta que, mientras se la follaba el cuarto chico, me vino la leche, se la metí hasta la garganta y me corrí.
    
    -Trágatela toda, zorra, no escupas, hasta dentro, puta, así, bien. Un latigazo de placer me recorrió el cuerpo, mientras mi leche caliente iba camino a su estómago.
    
    Cuando el cuarto chico le descargó los huevos dentro de su coño, le pregunté a ella: ¿quieres la última corrida en el coño o en la boca?
    
    Para sorpresa de todos dijo: prefiero en la boca, no puedo más, estoy reventada.
    
    -Vale, no te vamos a follar más, pero te vas a tener que tragar toda la leche que te demos, sin rechistar, hasta la última gota, aunque sea mucha.
    
    -Sí, pero no me ...
    ... folléis más.
    
    -De acuerdo, pero esta vez no te vamos a follar la boca, solo te vamos a poner la polla en la boca cuando estemos a punto de corrernos para que te tragues toda la lefa que quede en las pelotas.
    
    Dicho esto, todos los chicos empezaron a masturbarse para sacar una última corrida. Muy bien, abre bien la boca, así, aguanta así, perfecto- le dije. Uno a uno se fueron corriendo en su boca y ella fue tragando una corrida tras otra, los chicos no quitaban su polla hasta que ella no había relamido hasta la última gota y no enseñaba la boca vacía.
    
    Los cinco chicos estaban exhaustos, era el momento de vestirse e irse. Despedí a los chicos no sin antes darles los móviles y recordarles que esto debía seguir en secreto, sobre todo si querían repetir, además nadie lo iba a creer. La primera parte de mi venganza se había consumado. Ella no sabía qué chicos habían llenado su estómago de leche, ni que al día siguiente iba a verlos en clase. Ahora era el momento de la pastilla antibaby. 
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