Campanilla 3
Fecha: 28/06/2024,
Categorías:
Dominación / BDSM,
Autor: jessmartin, Fuente: TodoRelatos
... nuestras lenguas y seguimos besándonos, bajo los tirantes del camisón que lleva, y en cuanto veo sus pezones ya duros, dejo de besarla y me apodero de ellos.
“¡Uhmmm!” gime Karen al sentir mi boca sobre sus pezones. “¡Que bueno!” exclama cuando les chupo y les muerdo.
“Seguro que ninguno de esos chicos que te follas te hace sentir así;” le digo llevando mi mano a su coño, encontrándolo empapado.
“¿Has estado masturbándote mientras me esperabas?” le pregunto pellizcándole el clítoris, haciendo que su gemido se convierta en un pequeño grito.
“Sí, lo siento;” me responde bajando la mirada, abriéndome una puerta que no me esperaba.
Dejo de masturbarla y salgo primero de la habitación y luego del piso, llamando a la puerta de enfrente, donde viven dos chicos con los que hemos coincidido en alguna ocasión en la zona de fiesta.
El que abre la puerta es Lucas, el más alto de los dos, casi metro noventa, con un poco de sobrepeso, juega como tackle en el equipo de fútbol de la universidad.
“¿Pasa algo Elisabeth?” me pregunta sorprendido al verme a esas horas.
“Avisa a Justin y si queréis follaros a Karen seguidme;” le respondo.
Veo como el rostro de Lucas se ilumina y sin perder tiempo entra para avisar a su amigo, los dos salen rápidamente y se paran en la puerta.
“¿A qué esperamos?” me dice Justin, aunque no le contesto, no puedo dejar de mirar su pecho desnudo, y no solo por todos los músculos que tiene, sino sobre todo por cuatro cuadrados rojos que ...
... tiene marcados y que sé bien de que son.
“Seguidme;” les digo finalmente volviendo a entrar en el piso de Karen, entrando en el salón donde permanece en la misma postura que la deje.
“Primero os vamos a dar un bonito espectáculo lésbico y luego nos vais a follar;” les comento. “Pero nos vais a follar los dos a cada una de nosotras, sino no hay trato. ¿Entendido?”
“¿Por qué no íbamos a querer follarte;” me dice Justin agarrándome por la cintura para acercarme a él y besarme en el cuello.
“¿Karen no tiene nada que decir?” me pregunta Lucas, mirando a mi amiga.
“Nada, esta noche hace todo lo que yo le digo;” le respondo sin ni siquiera mirarla.
Los chicos mueven uno de los sofás para colocarse delante de nosotras y yo vuelvo a sentarme al lado de Karen, comenzando de nuevo a masturbarla sin perder tiempo.
De nuevo me detengo después de unos minutos, dejándola otra vez al borde del orgasmo. Me pongo de pies y comienzo a desnudarme, cuando lo hago me tumbo entre las piernas de Karen y comienzo a comerle el coño.
El coño de Karen está chorreando, y así se lo muestro a los chicos recogiendo sus jugos con los dedos, enseñándoselos antes de llevármelos a la boca.
“¿Nunca te habían comido el coño?” le pregunto imaginándome la respuesta.
Karen no me contesta, solo mueve la cabeza de forma negativa.
“Los chicos no te han oído;” le digo pellizcándola uno de sus pezones.
“Nunca me han comido el coño, los chicos solo quieren follarme y luego correrse en mi ...