Esclavizados por una deuda (episodio II)
Fecha: 15/09/2024,
Categorías:
Dominación / BDSM,
Autor: AFOXB, Fuente: CuentoRelatos
... realmente era lo que eramos ahora, objetos sin voluntad, sus juguetes de placer. Estuvieron un buen rato follando entre ellos, usando a Carla como complemento. Yo solo podía imaginar las practicas y posiciones que adoptaban por los sonidos primarios que escuchaba. De repente, me fije en mi mismo, estaba moviendo rítmicamente, esforzándome por contener las arcadas, y mi polla dura como pocas veces. ¿Realmente me excitaba todo eso? ¿Me ponía cachondo chupar un dildo de latex mientras, unos practicamente desconocidos se follaban a mi mujer a dos metros de mi? Realmente no me reconocía.
Un fuerte gemido me indico que David volvía a correrse.
—Uf eso ha estado muy bien —dijo Naomi con la respiración entrecortada.
—Muévete, tengo que mear —dijo David.
—Espera ¿donde vas? No hace falta que des un paso —dijo Naomi con voz maliciosa—. ¡Perra, ya has oído a tu amo! Tiene que mear. Abre la boca.
Un silencio, seguido de un bofetón. Yo sabía que Carla siempre había sido reacia a aquellas cosas, para ella, quienes practicaban al lluvia dorada eran unos pervertidos. ¿Pero que otra cosa si no, eran nuestros amos?
—¡No me has oído! Nadie te ha preguntado, abre la boca.
Escuche como el meado de David empezaba a caer, ¡Dentro de la boca de mi mujer! Realmente no había limite en cuanto a lo que nos harían. Escuche como Carla se atragantaba con el liquido, como llevaba su boca y desbordaba manchado todo su cuerpo.
—Mira como lo has puesto todo, cerda —dijo Naomi riendo—. ...
... La próxima vez te obligare a sorber del suelo cada gota que se te caiga. Pero hoy te has portado bien, después de todo, ven debes de echar de menos a tu marido.
Naomi me indico que podía sacarme aquel dildo de la boca, me giro y hizo que carla se arrodillara enfrente de mi. El maquillaje estaba todo movido, como si volviera de una fiesta loca, el peño enmarañado, tenía corrida por toda la cara, aun podían verse gotas de pis que le salpicaban toda la piel, olía ademas de a orín, a sexo y sudor. Nunca la había visto de aquella manera, nunca me había excitado tanto solo de verla.
—Besaos quiero que disfrutéis el uno del otro —ordeno Naomi—. Quiero que lamas la piel de tu mujer, que sabores su humillación.
Hicimos lo que nos dijo nuestra ama, ¿cómo no hacerlo? Ya habíamos asumido que tendríamos que obedecer, fuera lo que fuera. Y con el tiempo aprenderíamos a disfrutarlo, a desearlo.
Acaricie sus cuerpo mientras la besaba apasionadamente, ella me devolvía los besos, pero no eran los besos de mi mujer, eran los besos de un animal, una bestia sedienta de más que no puede reconocer.
Naomi entro a la ducha, levanto una pierna y la apoyo en la pared. Esta vez fue ella quien orino encima de nosotros, apuntando a nuestras bocas entrelazadas. Continuamos besándonos con más ansia mientras bebíamos el néctar que nuestra ama nos ofrecía.
Mientras David y Naomi se duchaba, yo termine mi tarea de limpiar los consoladores que habían usado. Mi mujer simplemente se enrosco en el ...