1. UNA NOCHE DE FIESTA CON MI HERMANA SEGUNDA PARTE


    Fecha: 02/10/2024, Categorías: Incesto Autor: miriammimi, Fuente: RelatosEróticos

    ... que desde que vi a mi hermana vestirse no podía dejar de pensar en que, aunque me la había follado, no la había visto desnuda, solo las tetas. Al haberlo tenido tan cerca, ese antiguo deseo juvenil de verle la vagina a mi hermana había crecido intensamente, lamentaba no habérsela podido ver y sabía que era la última oportunidad, que cuando ella se fuera seguramente no volvería a tener otra ocasión para que me la enseñara, ya que lo que acababa de suceder entre nosotros esa noche era algo que no se volvería a repetir.
    
    Por eso, cuando me di cuenta que Miriam pensaba retirarse, superé la vergüenza que me daba y sin pensarlo hablé. Se lo dije de manera muy distendida, como si se lo pidiera porque lo encontraba justo pero realmente no me importara demasiado verla o no. Por alguna razón, me daba vergüenza que mi hermana supiera que tenía muchas ganas de verla desnuda, no sé por qué...
    
    - Oye, pero no vale, tú me has visto pero yo no te he visto a ti...
    
    Era obvio que, al no sentir ya la excitación del momento en que estábamos teniendo sexo, quizá haberse arrepentido de lo que habíamos hecho, y habernos vestido, ella no iba a desnudarse otra vez para que yo la viera. Lamentaba profundamente no haberme atrevido a pedírselo mientras estábamos teniendo sexo, haberle quitado el vestido igual que le había quitado las braguitas, y haberla así podido ver completamente desnuda. Por haberme dado vergüenza había perdido la oportunidad y ya nunca volvería a tener otra. No solo eso, ...
    ... además cada vez que estuviera con ella me moriría de vergüenza al pensar como ella sí me había visto y tocado el pene durante tanto rato, ya que mientras pensaba esto cada vez iba sintiendo más... Se lo pedí sin esperanza alguna de que me enseñara su intimidad, pero era la última oportunidad y arrepentirse luego de no habérselo pedido era mucho peor que arrepentirse de no haberla visto...
    
    Miriam volvió a girarse hacia mí y se me quedó mirando durante unos segundos sin decir nada, con una expresión que mostraba que estaba dudando qué hacer. Supuse que estaba pensando de qué manera decirme que no iba a desnudarse delante de mí sin que me molestara o me sintiera dolido. Y entonces, cuando ya estaba a punto de levantarme porque me había quedado claro que no iba a hacerlo, mi hermana se cogió el borde del vestido y de un tirón rápido hacia arriba como si hubiera decidido no pensarlo más y hacerlo antes de que le diera más vergüenza (días después hablando me confesó que había sido exactamente así) se subió la falda hasta la altura del ombligo.
    
    Me quedé petrificado, inmensamente sorprendido de lo que acababa de hacer mi hermana, ya que en ningún momento había creído que pudiera hacerlo de verdad... Por fin, por fin estaba viendo la vagina de mi hermana, por fin sabía como era, y era tal y como me la había imaginado cuando se la había tocado mientras teníamos sexo. Estaba embobado, con la vista fija en la vagina, fijándome en todos los detalles, como si fuera la primera vez que ...
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