1. Mi amiga de la oficina - completa (06 - FIN)


    Fecha: 15/10/2024, Categorías: Infidelidad Autor: Abel Santos, Fuente: TodoRelatos

    ... puñetero trabajo te haya costado las bragas… —le sonreí con picardía.
    
    Ella sonrió a su vez y, revolviéndome el pelo, respondió:
    
    —No me importa. Ha valido la pena.
    
    Comenzamos a recoger los papeles y apagamos los ordenadores. Terminábamos de introducir todo en nuestras mochilas, cuando mi teléfono sonó con un timbre estridente.
    
    En aquella época no existían aún los modernos móviles, con aplicaciones de mensajería comowasap y similares. De haber existido, esta historia habría terminado de otra manera. Un mensaje que se lee en privado no genera tantos problemas como una llamada de voz.
    
    —¿No vas a cogerlo? —preguntó María extrañada al cuarto o quinto timbrazo.
    
    —Si, claro… —carraspeé.
    
    Tomé mi flamante Nokia y me alejé lo más que pude para responder. Y al hacerlo susurré con el volumen más bajo que conseguí.
    
    —Sí, dime… —respondí.
    
    La voz del otro lado era la de mi novia. Me llamaba para recordarme el compromiso que teníamos aquella tarde.
    
    —¿Vas a tardar mucho? —dijo en un tono que sonó más estridente de lo que me hubiera gustado—. Recuerda que hemos quedado con mis padres para celebrar su aniversario.
    
    —Eh… claro… claro… —repliqué atolondrado—. De hecho, acabamos de terminar. En media hora llegaré a mi casa.
    
    —Ok, te recojo allí a las ocho.
    
    Colgué la llamada y recé para que María no hubiera escuchado la conversación. Aquel maldito aparato sonaba como un grillo, y la voz del otro lado de la línea se podía escuchar a varios metros de ...
    ... distancia.
    
    Pero no hubo suerte. Al girarme me choqué con mi compañera, que se había acercado tanto a mi espalda que casi me rozaba.
    
    —¿Esa era tu novia? —preguntó con expresión ceñuda. Su frase había sonado más a acusación que a pregunta.
    
    —Sss-sí… —respondí acongojado.
    
    —¿Pero no dijiste que lo habíais dejado? —su cara de enfado era un poema.
    
    Tragué saliva. Lo que había temido se cumplía punto por punto.
    
    —No, en realidad no dije eso… Lo que dije es que lo habíamos dejado… por un tiempo… Nos hemos dado un descanso y…
    
    —¿Estáis en un descanso y cenáis con sus padres?
    
    —Bueno… —cada vez deseaba más que me tragara la tierra—. No es eso… Es que ellos no lo saben y hemos acordado hacer un poco de paripé y…
    
    María no quiso escuchar más. Se colgó la mochila del hombro y echó a andar hacia la puerta.
    
    —¡Hijo… de… puta…! —fueron sus últimas palabras.
    
    *
    
    Podéis imaginar lo jodido que me quedé. El fin de semana había empezado como una locura de trabajo y había acabado como una locura de sexo. No tenía claro que quisiera volver con mi novia después de nuestro descanso. Pero tampoco sabía si entre María y yo podría haber algo. Al fin y al cabo ella también tenía novio. Aunque por culpa de aquella llamada, me temí que ya no fuera a haber nada de nada.
    
    O mucho me equivocaba, o un polvo de oficina era lo único que iba a tener con María.
    
    Me tomé un café para darle tiempo a salir del edificio y no cruzarme con ella en la parada del autobús. Ese día había hecho una excepción y ...
«1...3456»