UNA NOCHE DE FIESTA CON MI HERMANA PRIMERA PARTE
Fecha: 28/10/2024,
Categorías:
Incesto
Autor: miriammimi, Fuente: RelatosEróticos
... humedad del interior de su boca, su pelo que al inclinar la cabeza contra mi regazo me acariciaba las piernas desnudas, sus manos apoyadas contra mis muslos. Era la situación más incómoda y a la vez maravillosa de toda mi vida. Me quedé en silencio, sin saber qué decir. La vergüenza que no sentía porque mi hermana me viera la polla, o me la chupara, sí la sentía a la hora de hablar, no me atrevía a decirle lo mucho que me gustaba, o simplemente expresar en voz alta lo que no podía dejar de repetirme dentro de mi cabeza: "¡mi hermana me la está chupando!". Tenía una voz en mi cabeza que me repetía que debía decirle que parara, que dejara de hacerlo, y una parte de mí sabía que debía decirlo en voz alta, pero ganaba la parte que prefería quedarse quieto y disfrutar de lo que estaba pasando. Y, encima, creo que mi hermana me estaba haciendo la mejor mamada que había recibido en toda mi vida. No se parecía a las que podemos ver en películas porno, rápidas, con movimientos de cabeza muy rápidos arriba y abajo, con mucha saliva. Era lo más tranquila y lenta posible, pero el uso combinado de sus labios y lengua a la vez me estaba provocando una excitación superior a la de cualquier otra que me hubieran hecho, y solo la combinación del alcohol ingerido y el sueño por la hora que era impidieron que me corriera inmediatamente dentro de la boca de mi hermana.
Si no podía moverme y no me atrevía a decir nada, lo único que podía hacer era relajarme y disfrutar del momento, y eso fue ...
... lo que hice. ¿Estaría mi hermana teniendo también todos estos pensamientos contradictorios en su cabeza? Si era así, nada daba a entenderlo. Tampoco decía nada, no desviaba la atención hacia mi rostro para mirarme, simplemente tenía una mano apoyada contra mi muslo desnudo, con la otra sujetaba mi pene, y con la vista fija hacia abajo continuaba moviendo la cabeza lentamente hacia arriba y abajo, metiéndose y sacando mi pene de su boca. Lo único que me atreví a hacer fue colocar mi mano sobre la suya, la que tenía apoyada sobre mi muslo. Miriam reaccionó sujetándomela, entrelazando sus dedos contra los míos, y durante un rato más mi hermana me la continuó chupando mientras nos sujetábamos las manos y acariciábamos nuestros dedos entre ellos.
Tendría que haberlo dejado aquí. Apartar la cabeza de mi hermana de mi miembro, decirle algo, irnos a dormir, y al día siguiente hacer ver que no había pasado nada y tratar de seguir con nuestra relación como había sido hasta ese día, achacándolo todo al calentón ocasionado por una noche de diversión y alcohol. Pero estaba tremendamente excitado, dejé de pensar que quién me la estaba chupando era mi hermana, y lo que pensé fue que ella me había visto el pene y lo tenía dentro de su boca y yo también quería ver algo de ella. Alargué los brazos hacia ella, la sujeté por los hombros y tiré de ella hacia mí. Mi hermana se sacó mi pene de la boca y siguió arrodillada en el suelo entre mis piernas pero irguió el torso y se inclinó hacia mi ...