Una Nueva Puta en el Catálogo... es Profesora - Relatos Eróticos

Una Nueva Puta en el Catálogo... es Profesora

... enormes tetas se sacudieron debajo de ese bikini blanco con manchas negras mientras ella se ajustaba las orejitas de vaca- ¿Saldremos por aquí?

Giselle:Es la idea...-Le echó un vistazo, tragando saliva por lo despampanante que se veía la muchacha que hasta hace pocas semanas había sido su alumna.

Cristina:¿No tienes frío?-La muchacha se encogió de brazos, sin dejar de observar esa casona.

Eva:Ya debería estar aquí-Comenzaba a sentirse nerviosa y el ulular de un búho cercano la hizo sobresaltarse.

Karla:No podemos seguir esperando, profesora-La muchacha miró a Giselle, quien se mordió el labio, nerviosa.

Giselle:Tendremos que avanzar... o nos quedaremos atrás-Comenzó a desabotonarse el abrigo, pero a diferencia de Karla ella no se lo sacó. Simplemente lo dejó abierto.

La profesora de enormes tetas estaba utilizando un calzón estilo colaless con laterales, con detalle frontal en encaje y floreado. Cubriendo sus enormes tetas tenía puesto un corsé de encaje elasticado con una cinta central que le ayudaba a definir su cintura. Sus cierres eran broches por delante y unas cintas ajustables por detrás... parecía que esos enormes globos estaban por escapársele, pero esos cierres parecían firmes. En sus muñecas y cuello llevaba lo esencial para hacer de esa misión un éxito, las muñequeras y la correa de cuero que lo verían todo. Si su mente estaba en lo cierto, en unos cuarenta minutos Mateo y Julia, desde el neue Horizonte, comenzarían a registrar ...

... todo.

Karla:¿Ustedes no se sacarán sus abrigos?-Cristina y Eva rápidamente negaron con su cabeza y vieron, algo dolidas, como esa mocosa alzaba la frente y avanzaba detrás de Giselle.

Eva: Sentí que me dijo cobarde...

Cristina:Yo tengo frío-Ambas se miraron y encogieron sus brazos.

Mientras las enormes tetas de Karla se bamboleaban de un lado a otro mientras seguía el andar de Giselle, más atrás la seguían Cristina y Eva. Ambas mujeres habían optado por abrir sus abrigos al igual que la profesora de enormes tetas. A Cristina se le veía un calzón de encaje negro traslúcido con flores plateadas; mismo diseño para ese sostén. Eva utilizaba un calzón negro de encaje con pedrería algo lujosa en el logo de Victoria Secret y un sostén con push up con tirantes también brillantes de la misma marca que resaltaban todavía más sus grandes tetas.

Karla:¿Qué fue eso?-La muchacha, por primera vez, sintió algo de temor al escuchar el crujir de las hojas cuando son pisadas.

Giselle:¡Escóndanse!-La mujer de enormes tetas procuró susurrar de manera que sus compañeras la escucharan y lo hicieron, porque de inmediato se encondieron detrás de los árboles.

Guardia:¿Quién anda ahí?-Era la voz ronca de un hombre ya viejo.

Giselle:Y-Yo... me p-perdí-Pronto los ojos verdes de la mujer se vieron más claros cuando la luz de la linterna los iluminó.

Guardia:Quizás son las que nos prometieron, jefe-Esa segunda voz era más infantil y algo gangosa.

Guardia Viejo:No sea tonto, muchacho, ellas ...