El Príncipe y la Periodista 15 - Las Tribus 1 - Relatos Eróticos

El Príncipe y la Periodista 15 - Las Tribus 1

... matrimonio que había concertado para ella, e informarle de que era lesbiana, y después porque yo fui enviado a los Estados Unidos a estudiar.

Creo que es el periodo de tiempo más largo que hemos compartido, pero a pesar de no conocerla demasiado, me he dado cuenta de que algo ha cambiado en ella, y sospecho que la presencia de Rose tiene algo que ver.

Por desgracia, estamos llegando al oasis y no puedo evitar que mis pensamiento se vuelvan sombríos al ver las tiendas de las tribus ocupando toda su superficie e internándose en el desierto. No me gustan las tribus y yo tampoco les gusto a ellos.

La mayoría de los nómadas me ven como un intruso, para ellos al ser el hijo de una esclava blanca no soy digno de ser el nuevo Emir de Kanaan, prefieren incluso a mi hermana Nabila a pesar de ser una mujer solo por el hecho de que en ella y en Yaiza se unen los dos antiguos linajes que gobernaron Kanaan hace mil años.

Solo la Tribu de las Arenas, la más numerosa y poderosa de las ocho tribus, ve mi presencia como algo bueno, como una renovación, al fin y al cabo, Kanaan fue fundada por un ‘occidental’, el gran Alejandro, y la dinastía Ghazi tuvo su origen en los Amantes del Desierto, otros dos ‘occidentales’.

Por mi parte, la reticencia hacia las tribus viene por lo que representan: las leyes antiguas, el fanatismo religioso y la esclavitud en sus formas más bárbaras y terribles, todo lo que quiero desterrar para continuar con la apertura iniciada por mi padre, y no ...

... puedo ni tocar si no quiero provocar una guerra civil. Solo espero que esta visita y la presencia de Rose no causen demasiados problemas.

(punto de vista de Rose)

Me asusto al ver la cantidad de tiendas que se extienden ante mí, no me esperaba tantas y eso me provoca cierto temor.

Gracias a mis investigaciones y a las conversaciones que he tenido estos días en el harem, sobre todo con Rina, tengo una pequeña idea de la vida de los nómadas, aunque realmente cuando más he averiguado sobre ellos sha sido los dos días que la joven Rania estuvo en palacio.

Como he visto en estos días, en Kanaan como en la mayoría de los países musulmanes más tradicionales, las mujeres apenas tienen derechos, pero en el caso de los nómadas se ve todavía más acentuado, multiplicándose en el caso de las mujeres blancas, que son consideradas poco más que animales por las tribus, con prácticamente el único propósito de ser usadas como esclavas sexuales y de cría.

Tengo el ejemplo bien claro de lo que puede ocurrirle a una mujer en lo que le sucedió a Nahid, esclavizada y entregada a Caleb por su propio hermano como si no le importase nada.

Sin dejar de pensar en todo lo que puede ocurrirme, empiezo a observar lo que tengo a la vista, en el centro del oasis se alzan cuatro grandes tiendas, dos de ellas de un tamaño similar, la primera con ocho estandartes clavados en su entrada, representando a las ocho tribus, seguramente la tienda del Consejo de las Tribus, y la otra con el emblema del ...