Marcela mi vecina (IV): Fiestita en casa de Analía
Fecha: 19/12/2024,
Categorías:
Sexo con Maduras
Autor: MartinyMarcela, Fuente: CuentoRelatos
... buscar algo de beber para las dos pero en la barra fue interceptada por Ramón, un morocho grandote jugador de rugby. El tema es que Belén estaba en busca de ligue esa noche y se entretuvo tanto en el camino que no volvió mas.
Y la rubia se quedó sola en un rincón. Al instante fue rodeada por Javier, Tomás y Peter, se la querían levantar los tres y estaban a su alrededor como perros en celo.
Ya eran las 23:58, se terminaba el 20 de septiembre y el tan esperado día de la primavera asomaba. Y como si fuese víspera de Navidad, hicieron la cuenta regresiva todos en el amplio patio al borde de una piscina. La noche se prestaba para la diversión y el lugar era espectacular. A las 0:00 del 21 de septiembre levantaron sus copas y brindaron por la llegada de la primavera. Ya Marcela estaba más animada con Juanjo a su lado levantando la copa.
Ramiro puso música a todo volumen, explotaban esos parlantes y todos bailaron y la pasaron bien. Le puso más onda con la música y ya no ponía temas de reggaetón y trap... que no eran muy del estilo de las veteranas.
Temas de cuarteto y cumbia sonaban. Todos salieron a bailar, los que tenían a sus novias lo hicieron, Belén con Ramón, los que pudieron sacaron a la pista a las chicas que estaban disponibles y los que quedaron sin pareja bailaron entre ellos, y como era de esperar Marce con Juanjo.
Juanjo le hacía marca personal a la doctora Rodríguez y bailaron cara a cara, el ya la agarraba de la cintura y ella se desenvolvía con ...
... total confianza. A ella le encantaba bailar y el chico tenía talento, era un buen partener. Sonó el tema Darte un Beso de Prince Royce, una bachata fenomenal y ahí se los vio más juntitos que nunca, la pierna del chico metida entre las piernas de la rubia, miradas cara a cara sus labios ya casi se rozaban y una manito atrevida se posaba en la frontera entre la cintura y el nacimiento de la nalga de la doctora, ahí le gustaba jugar en ese lugar tan deseado y prohibido. La escena era muy sensual.
Analía mientras tanto no perdió el tiempo. Bailó con Máximo otro de los invitados y se estaban comiendo la boca sin descaro. Ella tenía un putishort blanco bien metido atrás y parecía no tener puesta ropa interior. Máximo le metía manos por todas partes al mismo tiempo que sus lenguas se trenzaban a la vista de todos.
Marcela se sintió incómoda, ver a su amiga así de zarpada hasta le dio vergüenza, se alejó y se sentó en una reposera alejada de todos.
Juanjo fue atrás de ella, se le acercó con un par de copas e intentó transportarla a otra realidad, la rubia todavía era chapada a la antigua, sabía medirse y no hacer chiquilinadas como su amiga. En el fondo se sentía mal por todo ese show casi porno de Analía.
Bebieron uno, dos y tres tragos. El chico pudo cambiarle el humor y de a poco la hizo reír.
Miradas en silencio, abrazos y tomadas de mano. Le hablaba al oído y la blonda sonreía, poco a poco ese iceberg difícil de romper iba cediendo en partes a esa altura de la ...