1. Al principio lloró, gritó, y hasta suplicó para que se lo sacase.


    Fecha: 15/01/2025, Categorías: Gays Transexuales Autor: Martehijodejupiter, Fuente: SexoSinTabues30

    ... traje algo de vaselina, y por un buen rato antes de enterrarle mi verga, primero me dediqué a dilatar su culo, con mis dedos.
    
    Así que cuando me coloqué tras él, y comenzó a sentir la cabeza de mi verga, como se iba enterrando dentro de su culo.
    
    Al principio lloró, gritó, y hasta suplicó que se lo sacase, pero al poco rato, mi amigo sin que yo le dijera nada, comenzó a menear sus nalgas, y ha gemir y chillar de placer como si fuera una chica, pidiéndome que le diera más, y más duro.
    
    Con el tiempo, seguí haciendo con él, lo que me daba la gana, mientras que mi amigo disfrutaba de todo lo que yo le hacía, ya fuera moviendo sus nalgas, o chupando mi verga.
    
    Hasta que una tarde, justo cuando lo tenía bien clavado, llegó otro de nuestros amigos, y nos encontró a mi penetrando a él por el culo, bueno, se lo podrán imaginar, al recién llegado mi amigo se lo tuvo que mamar, y luego dejar que lo penetrase, y así poco a poco, la mayoría de nuestros amigos fueron descubriendo, que a mi amigo le gustaba que le dieran por el culo.
    
    Por lo que ya al finalizar ese año, todos en el instituto, o sabían por referencias, que a él le gustaba que le dieran por el culo, o personalmente, ya se lo habían metido, o por lo menos lo habían puesto a mamar.
    
    La verdad es que nadie nunca le decía nada, pero un día al llegar a nuestro escondite, que me encuentro con una linda chica, bueno la verdad es que no reconocí a mi amigo de inmediato, ya que aparte de andar vestido de nena, se movía y ...
    ... hablaba como si realmente fuera una chica.
    
    Cosa que a mí, y al resto de los chicos nos encantó, al momento de darle por el culo, hasta que llegó un nuevo estudiante, del que mi amigo después de ver su verga, en el vestuario de la academia, se enamoró de él, o mejor dicho de su verga.
    
    Ya que el nuevo estudiante, era alto, moreno, con un cuerpo bien atlético, pero mi amigo, no se atrevía ni tan siquiera a insinuarle nada, por miedo a que le rechazase.
    
    Pero como yo había hecho muy buena amistad con el recién llegado, un día en que tenía a mi amigo, bien ensartado por el culo, le pregunté. Que si le gustaría sentir la verga de aquel chico entre sus nalgas.
    
    De inmediato, con voz afeminada, me dijo que sí, yo le dije que me encargaría de todo, y como a la semana le dije, al llegar a nuestro escondite, después de se pusiera un vestidito, esperase acostado, sobre un viejo sofá que había en ese lugar.
    
    Además, debía hacerse el dormido, por lo menos hasta que ya tuviera la verga de ese chico dentro de su culo.
    
    Mi amigo estaba muy alegre, por lo que me obedeció de inmediato, y apenas se desnudó, se puso únicamente aquel vestidito, sin más nada abajo, luego se acostó, y cuando sintió que nosotros habíamos llegado, se hizo el dormido, o mejor dicho la dormida.
    
    Yo levantando la falda del vestido, que tenía puesto, me dirigí al chico, y le dije. “Vez como te dije, se quedó dormido, y se puso este vestidito de puta. Así que, si tú quieres comerle el culo, antes de que se ...