Como convertí a mi esposa en una zorra ninfómana 7 - Relatos Eróticos

Como convertí a mi esposa en una zorra ninfómana 7

... gruñido de asentimiento. Si hablaba y reconocía la voz se acababa el plan, aunque con las sustancias que había en la copa era poco probable que reconociese nada.

Se desnudo y mostro su enorme verga bien tiesa, apuntado al techo, estaba dura como una roca, grandes venas las recorrían, de la punta asomaba un capullo rosado con un aspecto perfecto. Menuda polla gastaba el hijo puta.

Se acerco a su hermana y comenzó a tocarla, chuparle las tetas con los piercings, la beso, introduciendo su lengua en su boca. Se puso de rodillas a un lado y puso su pollón en sus labios. Isa abrió la boca desesperada y comenzó a mamar esa polla perfecta. Cualquiera que lo viese hubiera pensado que Isa llevaba anos queriendo comérsela, era una locura pensar eso, ¿o no?

Mientras se la mamaba y recorría con su lengua todo el tronco, el comenzó a masajearle el clítoris, ella se retorcía de placer, tuvo su primer orgasmo casi instantáneamente, la media hora de espera la había dejado encharcada e hiper excitada.

Ella siguió chupando. El la follaba la boca, metiendo todo lo que podía de su rabo en su garganta, notando como ella babeaba sobre su rabo y las sábanas. Estaba erguido con los ojos cerrados, disfrutando de la mamada de su hermana.

La puso boca abajo, metió una almohada debajo de su barriga y puso su pollón en la entrada de su vulva. La polla se deslizo fácilmente hacia el interior de mi mujer, ...

... ella gimió de placer, el comenzó a bombear. Su rabo entraba y salía casi completamente en cada acometida. Isa movía el culo acompasada, estaba disfrutando cada centímetro del rabo de su hermano.

El estaba extasiado, colocado, dando a Isa una follada de escándalo, ella gemía como una cerda. No hacían falta micros, se oía a través de las paredes sus chillidos.

Y entonces paso lo que tenia que pasar. Ella chillo:

Nacho, se quedó parado, acojonado

Ella se quito el antifaz y se le quedo mirando

Ella no le dejo reaccionar, se desato y le agarro del rabo.

Isa estaba fuera de sí. Le empujo, quedando el tumbado y se subió, clavándosela hasta el fondo y empezando a cabalgarle a lo bestia.

Isa hacia lo que Anton le había dicho. Nacho con el sentido común todavía nublado por las drogas de Anton, la agarro de las caderas y comenzó a penetrarla salvajemente.

El rabo de mi cuñado estaba mas duro que nunca, y de repente empezó a palpitar, el comenzó a gemir e Isa se tumbó sobre él y comenzó a besarle mientras la leche de su hermano rellenaba su útero. Se veían restos de leche caer sobre sus huevos. Le había vaciado completamente.

Isa se apartó y se tumbó. Él se quedó también tumbado, recuperando el aliento.

Justo entro por la puerta de la habitación.

Anton se fue. Nacho se vistió y se largó. Nosotros nos fuimos a casa. El sábado era el cumpleaños de mi cuñada.

Continuara …