Mi sobrina me domina
Fecha: 27/01/2025,
Categorías:
Incesto
Autor: VictoriaSG, Fuente: TodoRelatos
... opino lo mismo.
- ¿Cuando erais pequeños te trataba bien?
- Solo cuando le interesaba.
- Me parece que yo he salido a él.
- ¿Eres una interesada?
- No, pero suelo estar dispuesta a cualquier cosa para salirme con la mía.
- Dime que estos días te vas a portar bien, Thais.
- Por supuesto, siempre que me dejes salir un rato.
- ¿Qué es eso tan importante que tienes que hacer fuera?
- El sábado es el cumpleaños de una amiga mía.
- Tu padre me ha dicho que no tienes amigas.
- Da igual, la cuestión es que estoy invitada a su fiesta.
- Pues no va a poder ser, porque tienes que estudiar.
- ¿Te crees que estoy las veinticuatro horas con el puñetero libro delante?
- No me hables así.
- Perdón, tito, tienes razón.
- Quiero que nos sigamos llevando bien, pero no voy a traicionar a tus padres.
- Eso ya lo veremos.
Quedaban dos días para la supuesta fiesta y la desesperación de Thais comenzaba a notarse. Hasta ese momento solo me había mostrado sus ganas de salir de casa, pero no había ni rastro de ese comportamiento tan malo del que me habían advertido. Aunque mi sobrina me lo suplicaba a todas horas y yo no veía motivos de peso para no dejarla asistir, no pensaba traicionar a mi hermano.
A falta de un día decidió cambiar de estrategia. Quizás pensaba que yo era tan tonto como para no darme cuenta, pero comenzó a utilizar todas esas armas que seguramente le daban resultado siempre que se relacionaba con chicos. En el rato que pasamos ...
... en la piscina no dejó de provocarme, acercándose todo el rato a mí y colocando sus grandes pechos disimuladamente sobre mi cuerpo.
Además de ser un hombre adulto y responsable era su tío, pero eso no hacía que fuese más sencillo lidiar con una situación así. Thais, pese a su juventud, me parecía la hembra más explosiva que había tenido nunca tan cerca. Me costaba mucho contenerme mientras, camuflándolo como inocente jugueteo, refregaba su cuerpo semidesnudo contra el mío.
La diversión duró el tiempo que tardó Thais en darse cuenta de que no iba a ceder. Cuando vio que seguía sin cambiar de opinión, la muchacha salió de la piscina y se fue hecha una furia a su habitación. Solo en ese momento pude salir del agua sin que se diera cuenta de que debajo del bañador escondía una erección de caballo.
Ni siquiera durante un segundo se me pasó por la cabeza la posibilidad de seguirle el juego. Su cuerpo era muy tentador, pero tenía presente los lazos de sangre que nos unían, que Thais era esa niña a la que cuide cuando solo era un bebé. Justo por ese motivo me sentía tan culpable cuando su perfecto cuerpo me excitaba tanto.
Ese día me fui a dormir pensando que Thais ya se había dado por vencida, que pensaba que ya no tenía tiempo para convencerme, pero no podía estar más equivocado. Durante la noche, mientras dormía plácidamente, mi sobrina se metió en mi cama y se abrazó a mí. Pese a estar medio dormido, me di cuenta de que estaba totalmente desnuda.
- ¿Qué haces?
- ...