Mi esposa, mi cuñada, un trío perfecto
Fecha: 03/04/2025,
Categorías:
Sexo en Grupo
Autor: andresbcz, Fuente: CuentoRelatos
... lengua buscaba jugar con la mía. Mientras sus manos estaban tocando mi pene, aún sin atreverse a bajar la bragueta. De nuevo fue el turno de Camila, esta vez a más de besarla puse mi mano sobre sus senos, apretándolos. Tomé la mano de Camila y la puse sobre mi pene, al lado de la mano de mi esposa que estaba indecisa.
Como mi esposa estaba al lado de mi mano más hábil, fui pasando por debajo de su vestido hasta llegar a su vagina y empecé a meterle los dedos, esto mientras dejaba de besarla y volvía con Camila. A ella le saqué un seno y empecé a chuparlo y enseguida volví con mi esposa y le bajé todo el escote, dejando al descubierto sus dos hermosos senos, y los empecé a chupar. Para entonces mi pene ya estaba bien duro.
yo: mi amor (a mi esposa), saca mi verga del pantalón, que ya quiere salir.
Mi esposa bajó el cierre del pantalón, y sacó mi pene, empezó a masturbarme. Volví hacia mi cuñada, rápidamente le saqué la blusa y la dejé con el sostén pero con los dos senos fuera, y ahora era su turno de que yo los chupara. Mientras mi esposa me masturbaba con sus dos manos. Cogí la mano de Camila y la puse cerca de mi pene, esperando que mi esposa le ceda el turno, y así fue. Ahora Camila tenía mi verga en sus manos y mi esposa miraba como su hermana me masturbaba.
Ya quería que me chuparan la verga, así que me paré en frente de las dos y me bajé el pantalón. Dejando al descubierto mi pene erecto.
Esposita: no pues, ahora qué desea el afortunado. Las dos hermanas ...
... se reían.
Yo: mi amor, lo que te gusta hacer.
Me acerqué y mi esposa tomó mi verga y se la metió en la boca, comenzó a darme una mamada como si estuviera enseñando a su hermana cómo se hace, me daba besos, lo lamía y me chupeteaba los huevos. Me moví un poco más hacia la mitad de las dos, es cuando mi esposa le dice "qué sigue" a Camila. Ahora Camila comenzó a chuparme el pene, ella despacio, tanteando a ver hasta dónde puede meterlo, como si nunca lo hubiese hecho. Entonces recordaba que hace una semana me dió una mamada igual que su hermana. Poco a poco fue liberándose y me lo chupaba hasta el fondo.
Que rico fue ver como una a una iban turnándose para chuparme la verga, ambas con las tetas fuera. A eso le dije a Camila que se quitara la licra que llevaba puesta. Y a mi esposa le quité el vestido y las dos quedaron solo con sus tangas. Me arrodillé para poder chuparle las tetas a las dos. Que rico tener esas cuatro tetas grandes, blanquitas, las de mi esposa son más redonditas y paraditas, con los pezones pequeños, las de mi cuñada un poco más flácidas pero más grandes y con los pezones grandes.
Las dos se pararon y los tres abrazados me iba de lado a lado besándolas, en los labios, en las tetas, mientras ellas con sus manos jugaban con mi pene. Tenía que tener cuidado en que mi esposa no perdiera la seguridad de que es ella la que tenía el control, así que al oido le dije "dime amor, quien empieza", a lo que me dijo que ella va primero.
Acosté a mi esposa en ...