1. El sueño de Marta 2


    Fecha: 15/04/2025, Categorías: Incesto Autor: ElFantasmaRojo, Fuente: TodoRelatos

    ... aire y cuando sintió que el orgasmo se iba esfumando, empezó a mover la mano a lo largo de su raja. Constanza se movía despacio pero con fuerza, disfrutando cada centímetro de verga que entraba y salía de ella.
    
    —¿Te gusta, mamá?
    
    —Ay, si, me encanta… —masculló su madre apretando los dientes.
    
    —Muévete más rápido —le ordenó golpeando sus pechos con ambas manos. Su madre apuró el vaivén de su pelvis hasta que sus movimientos se convirtieron en sentones, que dejaban ver por un momento la verga de su hijo casi en toda su extensión.
    
    —¿Así? ¿Así te gusta,Benji? —Ambos se miraron a los ojos tomando un ritmo más rápido. Benjamín la levantaba un poco con cada embestida y ella se dejaba caer con la inercia; la cama rechinaba violentamente respondiendo a sus movimientos. Martha se jalaba los pezones y presionaba a la entrada de su vagina, que expedía ya chorros de fluido. Hundía los dedos un par de veces y luego los sacaba para metérselos a la boca, disfrutando su sabor salado.
    
    Nuevamente Benjamín golpeó sus pechos y Constanza gimió con fuerza.
    
    —¡Otra vez! —Le pidió extasiada su madre, inclinándose más sobre él. Benjamín chupó sus pezones y le golpeó nuevamente. —¡Así! ¡Dame así! —Repitió el gesto intercalando con la lengua y mordiendo sus pechos. Constanza vibraba al sentir los dientes de su hijo apretujando sus pezones y movía mas fuerte sus caderas. Martha se masturbaba tan fuerte que estuvo a punto de perder el equilibro y se recargó en la pared con ambas manos. ...
    ... Benjamín levantó la cabeza y se detuvo mirando hacia la ventana. —¿Qué haces? ¡Dale! ¡Dale! —le dijo su madre a punto de llegar al orgasmo.
    
    —Creo que escuché algo afuera. —Contestó sin quitar la vista de la negrura del exterior.
    
    —¡Cógeme, que ya casi me vengo! —le dijo sin dejar de propinarle sentones. Benjamín continuó moviendo las caderas pero no quitaba la vista de la ventana. Sabía que había visto algo, pero no estaba seguro de qué era. Martha se percató de eso y no se movió para nada, mirándolos desde una distancia segura para no delatar su presencia.
    
    Benjamín entonces se incorporó y besó a su madre con vehemencia. Abrazándola de la cintura y jugando la lengua con la de ella. Constanza le correspondió el gesto y se ruborizó por la brusquedad, lo que le hizo mojarse aún más. Ahora él se movía despacio, apenas sacando un poco la verga de su capullo, pero metiéndola bien hasta el fondo. No para de besarla, y Constanza le rodeó el cuello con los brazos. De un solo movimiento, logró acostarla quedando sobre ella, sujetándole ambas piernas de las pantorrillas. Así inició un mete saca que la hizo retorcerse, agarrándose del borde de la cama. Ambos gemían casi al unísono, mirándose fijamente; estaban al borde del orgasmo.
    
    —Quítate el condón, te quiero sentir. — Benjamín recargó sus piernas en sus hombros y se lo quitó. Despues de hacerle un nudo, lo arrojó por la ventana sin que su madre se diera cuenta, cayendo casi en la cabeza de Martha, que se quedó helada por el ...