Memorias de Sandra. Primeros cuernos para Ramón
Fecha: 06/05/2025,
Categorías:
Infidelidad
Autor: mensajera22, Fuente: TodoRelatos
... caminos que se abrían ante nosotros.
La conversación continuó, cada ejemplo que proporcionaba aumentaba la intensidad en la habitación. "Supongamos Julián que me pides que baile sólo para ti, amasando mis senos, pellizcando mis pezones, fregando mi clítoris abierta como una cerda para ti hasta alcanzar mi orgasmo, mientras Ramón observa amordazado y atado", sugerí con una mirada coqueta. Las miradas se entrelazaban entre los tres, y Julián asentía con satisfacción sin dejar de follarme.
“¡Joder que buena que eres, puta!” me dijo nalgueándome con dureza mientras Ramón mostraba una sonrisa cómplice con un hilo de líquido preseminal uniendo su capullo con el vientre, en el que formaba un charquito. Ramón, con cada palabra, se emborrachaba de la nueva realidad que se estaba estableciendo en nuestra relación. "¿Y si le pido a tu marido que me llames 'señor' en lugar de Julián a partir de ahora?", lanzó como un desafío el jefe de mi esposo.
La tensión en el aire crecía, y yo respondí con un susurro obediente, "Por supuesto, Julián, es sólo un cornudo, una colilla que merece ser pisada. ¿Y yo? ¿Debo llamarte señor también?".
“No” Respondió Julián. “Mis putas me llaman por mi nombre”
Las palabras resonaban en el salón, creando un eco de sumisión que se esparcía por el el aire y por los muebles y las paredes. Las miradas entre Ramón y yo revelaban una mezcla de caos y excitación.
“Sigue mamando a tu marido cornudo, zorra” Ordenó Julián sin dejar de follar mi ...
... coñito empapado.
https://drive.google.com/file/d/1YPCfY6AjMUeQrkLO9gDIUDDOKaexoAWE/view?usp=drive_link
https://drive.google.com/file/d/1NoT9bhMjzrQSW6XO5adsr-cQbiWufG54/view?usp=drive_link
En la penumbra del salón las palabras de Julián sonaban con la aurtoridad que realmente tenían.
“Furcia, empálate con el rabo de tu esposo, quiero ver tu coño follado”
Me subí a horcajadas sobre mi marido y me penetré mientras Julián acercaba su mano para palpar el agujero de mi ano y después recorrer los testículos de Ramón y su verga hasta llegar a posar los dedos en los labios abiertos contra la tranca de mi mrido.
Las órdenes y los gestos del jefe de Ramón eran sugerentes y continuaban explorando los recovecos de nuestros sentimientos, mis fantasías más profundas con Julián y mi deseo de humillación y obediencia crecían y no parecían tener límite.
"Imagina, Julián, que me pides que use un collar con tu nombre en público, como una marca de propiedad", susurré, sintiendo cómo mi corazón latía con una mezcla de nerviosismo y morbo. Las miradas entre los tres revelaban un juego silencioso de deseo y sumisión.
"¿Estás dispuesta a llegar tan lejos como para que te folle un equipo entero de fútbol si yo te lo pido, Sofía?", preguntó Julián con una mirada intensa.
Mis labios formaron una sonrisa sugestiva hacía mi marido mientras respondía, con su polla totalmente dentro y mis pezones en su boca "Por supuesto, Julián. Estoy aquí para cumplir tus deseos y seguir tus ...