A hundred sexual anonymous cases (Nº 3)
Fecha: 16/05/2025,
Categorías:
Control Mental,
Autor: DJeff, Fuente: CuentoRelatos
Case 3: The psychologist
“Honestamente yo no recuerdo de la mayoría de las cosas que pasaron, pero gracias a mi compañera, que me relato todo lo que paso, pude poco a poco recordar casi por completo todo lo que ocurrió, jamás pensé que podría contarle a alguien esto, así que esto es un alivio para mí y bueno, para todos los que ‘sufrimos’ de lo ocurrido con el…” -Anónima.
Esto paso justo después de la pandemia, habíamos regresado a la Universidad, y poco después de retomar las clases presenciales, e intentar adaptarnos a la “nueva normalidad”, la universidad nos comentó que tendríamos un par de cursos de “inducción” para evaluar nuestra salud psico-mental, ya que hubo muchos casos de depresión, suicidio, ansiedad, etc., que se habían presentado en la población local, de manera que querían asegurarse que estábamos en un buen estado de salud para continuar con las actividades escolares. Un día, tomando la clase de “metodología”, el profe nos explicó que un psicólogo vendría, y nos daría el curso de inducción que, al parecer, estaba titulado “la nueva normalidad: ¿cómo me siento?”. Me pueden llamar Estefanía.
Profesor: Muy bien chicos, sin más que decir, les dejo al psicólogo Ramiro (Y una vez dicho esto, entro un hombre, joven, recién rasurado, trajeado y con una gran sonrisa en su rostro, se acercó a saludar/despedir al profesor y luego nos miró).
Psicólogo: Hola chicos, espero estén todos bien, mi nombre es Raúl Ramiro, soy el psicólogo que les dará su curso de ...
... inducción.
Profesor: Gracias psicólogo Ramiro, lo dejo en sus manos, con permiso.
Una vez el profesor salió, y cerró la puerta, el psicólogo se acercó a su escritorio, puso su maletín en este y empezó a abrirlo para sacar algunas cosas.
Ramiro: Antes de iniciar con el “curso de inducción”, que por cierto durara 5 sesiones, ¿alguien tiene alguna duda que quiera hacer? (Primero saco una botella de agua, luego un reloj de bolsillo, y finalmente un pañuelo. De mis compañeros, el jefe del salón, Omar, levanto la mano, e impacientemente hablo).
Alumno: Yo, ¿Por qué el curso de inducción? Sigo sin entender claramente de que tratara este curso, y porque lo necesitamos.
Ramiro: Buena pregunta, Omar, ¿verdad? (La pregunta nos sorprendió a todos, el psicólogo seguía buscando algo dentro de su maletín, así que no vio nuestros rostros de sorpresa, aunque no tuvo porque, el silencio fue su respuesta).
Omar: Si… ¿Cómo lo supo?
Ramiro: Bueno, antes de entrar al salón estudie la lista de alumnos. Claramente esta lista me da limitada información, pero sabía que el jefe de grupo eras tú, así que supuse que serias el primero en preguntar. Fuera de eso, lo único que se dé ustedes es que son 22 alumnos, de tercero, estudiando administración (Mientras terminaba su oración, se dio la vuelta a vernos, mientras sacaba de su maletín una pequeña cámara).
Omar: Oh, ya veo… (Todos nos quedamos callados, esperando a que respondiera la pregunta, pero también viendo las cosas que había ...