Reconvertirnos en otros - Relatos Eróticos

Reconvertirnos en otros

... ¿te gustaría hacerlo, o sea sin hacerle el amor?

—Hombre, me gusta hacer el amor.

—Sería eso o nada. —Se tomó su tiempo.

—Eso es mejor que nada. ¿Hay alguna que quiere que se lo haga? Dile que estoy dispuesto.

—Es hipotético pero puede.

—¡Que cosas más raras me preguntas! Yo bromeaba pero si lo dices en serio… ¿Y que chica querría eso?

—De momento se dice el pecado pero no el pecador. A proposito, ¿Te has hecho análisis?

—Me tienes en ascuas, por supuesto los hago cada poco.

A continuación, esa noche en la cama se lo solté a Toñi.

—German estaría dispuesto a meterla sin juegos amorosos.

—¿Qué? ¿Se lo has preguntado? Es broma ¿no?

—Esta vez es cierto no es un juego, me gustaría ver que te la mete. Todavía no sabe que es contigo. Veras cuando se lo diga.

—¿Te excitaría eso?

—Pues no creo o es posible que sí, no es mi razón, Sería como utilizar un consolador pero de carne perteneciente a Germán al que te gustaría ver la pollita, la verías en erección justo antes de que te la metiese por aquí. —Y le metí un dedo que ella en apartó.

—Ay déjame, me pones nerviosa. —Y se dio media vuelta y se dispuso a dormir.

—Entonces ¿Le digo que no?

—¡Que me dejes!

A la mañana siguiente.

—¿Y de verdad estarías dispuesto a ver como me la metía?

—La metía y la meneaba para adelante y para atrás, ¡umm que gustito!. Sí, estoy dispuesto si tú lo estás.

—¿Sería una sola vez?

—Con una vez creo que habría satisfecho mi curiosidad.

—Ni en ...

... broma te acostarías luego con mi hermana.

—Eso ni siquiera lo he pensado... bueno, puede que alguna vez, simplemente me gustó verla desnuda y lo he recordado a veces pero no es mi intención.

—Nunca te he engañado por lo que hace mucho que nadie salvo tú me la mete.

—Lo sé.

—Haz lo que quieras.

—Si quieres le llamo ahora mismo.

—Si tanto te apetece...

—¿A ti no te apetece nada? ¿Es solo por complacerme? Entonces no tiene mucho sentido.

—Bueno, algo de curiosidad tengo. Mira, toca. —Tenía suficientemente húmedo el coño para darme cuenta que curiosidad sí tenía...

Cogí directamente el teléfono y llamé delante de ella.

—Hola, Germán. Te acuerdas lo que hablamos. ¿Quieres saber quién es la chica que te hable...Pues… la chica es Toñi… sería una especie de trio yo la acariciaría y tú se la metes. Sí, Toñi..., si te viene bien me dices día… ¿mañana por la tarde? —Miré a Toñi que tenía un poco de cara de susto pero se encogió de hombros— Pues por nuestra parte mañana está bien. ¿A las siete?… pues hasta mañana.

Dejé el teléfono.

—¿Qué tal si aprovechamos esas humedades? —No hubo inconveniente.

El día siguiente llegó como llega todo. Toñi estuvo nerviosa en general, Cuando apareció Germán se dieron dos besos en los que se les notaban las expectativas a ambos. Serví unas copas, Toñi ron con coca nosotros whisky con coca. Hablamos un poco, Germán y Toñi bebieron bastante rápido, me pareció que por ganas de empezar. Aproveché para recordarle a Germán ...