1. El gordo y fuerte señor dueño de un Border Collie 2


    Fecha: 27/06/2025, Categorías: Bisexuales Incesto Sexo con Maduras Autor: ssss, Fuente: SexoSinTabues30

    ... evitarlo correspondo al mismo tiempo situando el mío en su cintura y compruebo con una mirada que su semblante ni se inmuta con mi acción.
    
    Ya acostado en mi cama y en penumbra no logro conciliar el sueño. Las imágenes de mi padre en pijama se suceden en mi mente cuando algo quiebra el silencio de la habitación. Afinando mi oído logro distinguir lo que parecen ser los gemidos variables en intensidad de una mujer. Me doy cuenta de que los gemidos provienen de la habitación de mis padres. Para cuando cesaron pude ver como la claridad de la luz del cuarto de baño se colaba por la rendija de debajo de la puerta de mi habitación.
    
    A la mañana siguiente despierto y recuerdo que es sábado lo que significaba que al no haber clases puedo retozar algo en mi cama antes de la hora del desayuno. Esa mañana mi madre siempre la emplea en ir a cocinar a casa de una vecina. Para cuando me visto y voy a la cocina ya se ha ido. Encuentro a mi padre sentado en la gran mesa leyendo el periódico y bebiendo un café. Levanta la cabeza y me mira de arriba abajo dándome los buenos días y volviendo a clavar la vista en la lectura. Noto que su cabello negro está aún húmedo de la ducha matutina y recién peinado con su raya al lado.
    
    Cuando me siento a comer los cereales con leche ni corto ni perezoso le suelto: “papá, anoche no podía dormir y oí como mamá gemía. Qué pasaba?” Mi padre paraliza la mirada en el texto unos segundos hasta que cierra el diario y empieza a repiquetear los dedos de su ...
    ... mano sobre la gran mesa de la cocina como buscando una respuesta hasta que me contesta con una mirada furtiva: “mamá y yo hacíamos el amor”. Yo frunzo el ceño y le pregunto: “me puedes decir cómo fue?” Él separa un poco su silla y me hace un gesto dándose una palmadita en su muslo indicándome que vaya a sentarme allí. Yo obedezco al momento. Va vestido con un pantalón azul marino, unos zapatos clásicos de cordones negros y calcetines a juego, camisa blanca desabotonada por arriba hasta la mitad del pecho y una rebeca de punto azul marina con botones.
    
    Inmediatamente que me siento en su pierna le abrazo y le doy un beso en la mejilla y siento el frescor del after-shave Floid que utiliza. “Cuando un hombre y una mujer se quieren hacer el amor, el hombre introduce su pene excitado en la vagina de la mujer y lo mueve afuera y adentro hasta que suelta líquido blanco espeso que se llama semen, y la mujer puede quedar embarazada de un hijo o no” me explica mientras me agarra por la cintura. “Me enseñas el tuyo?” Le pregunto con devoción y él me hace levantar de su muslo para abrirse la bragueta sacando la gruesa polla y los enormes huevos que quedan inertes colgando cuando vuelve a sentarse con las piernas abiertas. Yo, de pie, admirando aquellos enormes genitales, me acomodo otra vez en su muslo y le digo: “papá, es muy grande”. Y como un acto reflejo la cojo en mi mano y empiezo a moverla notando como empieza a hincharse a lo que él responde acercándome con su brazo y besándome en ...