Perversión familiar 13 - Relatos Eróticos

Perversión familiar 13

... había salido gratis, lo que no sabía era que su esposa ya les había pagado en especie, y la que salió más ganansiosa fue ella.

Amanda le sirvió a su esposo, llevándole el plato a la mesa, pero cuando le iba a servir al vecino, un corrientazo paso por su panocha, quería probar algo.

A. Ay vecino que pena molestarlo, ya mi esposo se puso a almorzar y él tiene que terminar para irse de nuevo al trabajo, ud me puede ayudar un momentito en la cocina.

B. Claro que si ome, ni más faltaba. Siga comiendo vecino que yo le ayudo a su mujer.

Camilo ni siquiera pensó en levantarse a ayudar, dejo que el tipo fuera a solas con su esposa a la cocina, este ni corto ni perezoso se la llevó cogida de las abundantes nalgas de la dama. Al llegar a la cocina, el le dijo.

B. Bueno mi amor, en que le ayudo pues

La dama se arrodilló ante el, saco su enorme pero flácida verga y la llevo a su boca.

A. Quiero comerme el postre antes que la comida, me vas a dar la lechita???

Esto hizo que el tipo se pusiera como el acero, incluso sintió que su verga creció unos centímetros más, Amanda engulló toda esa enorme polla, chupandola como poseída por un demonio, no, una demonia de la puteria, metía toda esa polla hasta que la pubis del tipo tocaba su nariz y la sacaba, dándole lametazos con su lengua, masturbandolo y acariciando los enormes huevos colgantes del tipo. Mientras Amanda se tragaba una enorme polla, su marido ...

... tragaba sopa, por como su propio esposo a menos de dos metros de donde estaba ella con una verga en la boca, solo comía inocentemente, hacia que acelerara su mamada, hasta que por fin consiguió lo que quería: una abundante corrida en su boca, que gustosa trago, gota a gota hasta dejarla completamente limpia, luego oyó unos pasos provenientes del baño y cayó en cuenta que no solo su esposo estába en casa, también su adorado hijo. Por lo cual se levantó rápidamente, le dijo al tipo que guardara su provocativa polla y salieron de nuevo al comedor.

C. Que tanto puso a hacer al señor? Casi que no lo suelta

B. Tranquilo vecino, a mi me gusta ayudar mucho a la gente, es más, venía era como a eso nomás jajajaja, muchas gracias por el ofrecimiento pero me tengo que ir

A. Ay que pena vecino, pero muchas gracias a ud por la ayudita. Estaba muyyyy rica!!! Digo, muy pesada para moverla solita jijiji

El tipo salió otra vez como había entrado, con una erección de campeonato.

S. Mamita, quién estaba???

A. El vecino Bruno mijo, pero ya se fue.

Aunque estaban sus padres, a Sam le hubiera gustado ver a su vecino, y porque no, que se quedará un ratico a «jugar» con el, pero el vecino se fue contento por haber jugado con la mamita.

Mientras almorzaban, Camilo les dijo que se quedaría en la casa el resto del día porq

ue se sentía cansado, pero de verdad tenía mucho miedo de tener que ver a sus dos enormes compañeros.