El nuevo maestro del pueblo (8)
Fecha: 31/07/2025,
Categorías:
Sexo con Maduras
Autor: Alfonso, Fuente: TodoRelatos
... segundos y se acabó sentando. Me senté a su lado y esperé mirándola con una sonrisa seductora.
- Vale, te diré algo confiando en que no me harás ninguna faena.
- Tranquila, seré lo más discreto que hayas conocido.
- La condesa – comenzó a hablar pausadamente – tiene mucho dinero como ya te he dicho, y a veces monta fiestas en su casa, y también en otra casa de campo aislada que tiene a unos quince kilómetros, arriba en las montañas, e invita a mujeres del pueblo.
Se quedó cayada y pregunté de nuevo.
- Y que tiene eso de extraño.
- Pues que no invita a varias a la vez, lo suele hacer de una en una y a escondidas, sin que se entere nadie.
- Si lo hace así, como te has enterado tú?
- Porque ha invitado un par de veces a Laura, la mujer del panadero, y después de insistir infinidad de veces me lo ha contado.
- Pero que te ha contado? Es que ocurren cosas raras en esas fiestas?
- Jajaja, raras no, pero hay mucho folleteo.
- Folleteo… con quién?
- Con gente que viene de fuera. Me dijo que todos se ponían máscaras para que no se reconociesen entre ellos.
Eso me empezaba a cuadrar con lo que me había contado Virtu. Quizás sería Laura una de las que había reconocido por la voz. La intriga y el morbo comenzaron a correr por mis venas como los efectos de una droga y ya no pude parar de preguntar.
- Pero entonces, quién van a esas fiestas, solo una mujer del pueblo cada vez y el resto de fuera?
- No lo sé, no me quiso contar más. Creo que le ...
... da tanto miedo de Genoveva como al resto. Lo de que ha invitado a más mujeres del pueblo tan solo lo supongo, pero nadie abre la boca.
- Crees que si se lo pregunto a ella me lo contará?
- Oye, no te pases. Si se entera que te he dicho algo seguro que no me vuelve a dirigir la palabra.
- Tranquila, sabré cómo sonsacarla sin que sepa que me has dicho nada.
- Quizás si te la follas bien le saques algo, jajaja. – volvió a su estado adorable y risueño.
Me puse a desayunar y Adel a sus quehaceres. Mi mente comenzó a cavilar en cómo entrarle a Laura para sonsacarle algo. La idea que me había dado Adel de una buena follada podría dar resultado. Cogí el móvil y contesté a sus mensajes.
+ Que tal Laura. Me invitas a un chupito, que acabo de desayunar?
+ Claro! Ahora mismo. – contestó casi de inmediato – Pero ven por la parte de atrás. Es mejor evitar los cuchicheos.
Su respuesta parecía más sensata que su desenfreno del día anterior. No le oculté a Adel que iba a verla, y me indicó el mejor camino para evitar a la gente que pudiese andar por la calle. Me fui por donde me había dicho hasta casi salirme del pueblo y cogí un sendero que daba a los huertos de la calle donde vivía Laura. Caminé despacio, sin hacer ruido y mirando a todos lados. Los muros de cada huerto impedían que me viesen desde las casas, y eso me tranquilizó.
Nada más llegar al huerto de Laura, no tuve ni que llamar. Con la puerta ligeramente abierta observaba mi llegada. Me hizo pasar deprisa ...