Me pagaron una deuda, con una mujer (6): Otra sumisa
Fecha: 08/10/2025,
Categorías:
Dominación / BDSM,
Autor: Cervero2012, Fuente: CuentoRelatos
Volví a mi casa ya de noche, me encontré a Ana sentada en el living con poca iluminación, como mirando a la nada y con síntomas de haber estado llorando. Me acerque lentamente, me senté a la par de ella y la abrace.
Ana: Si no me hubiera cruzado contigo viviría engañada toda mi vida, y hasta terminaría en un agujero mucho más profundo del que he estado.- dijo mientras apoyaba su cabeza en mi hombro.
Yo: Nada te pasara yo te protegeré siempre.
Ana: y yo siempre te serviré.
Nos besamos dulcemente, hasta que Ana metió su lengua en mi boca y su mano empezó a masajear mi miembro por encima del pantalón. Ella se subió a caballo encima de mí, nos besábamos mientras ella se restregaba sobre mí, mi pene en segundos consiguió su máximo esplendor, baje mi mano a sus nalgas y empecé a estrujarlas. Nos separamos y mi boca busco su cuello, de un tirón abrí el escote del vestido y con mi lengua recorrí parte de sus pechos.
Ella torpemente intentaba desabrochar mi pantalón, no queríamos separarnos, se levantó un poco y lo consiguió, sobre la misma corrió su tanga hacia un lado y llevo mi miembro a su vulva, con su mano hacia presión con mi miembro contra sus labios, una y otra vez, hasta que por lubricación, calentura y un movimiento de cintura mi pene termino por completo dentro de ella, un gemido gutural dejo escapar.
Yo: Mmm esto está demasiado bueno.
Ana: Si, demasiado cariño.- Lo dijo a propósito, mirándome a los ojos y esperando mi reacción.
La tome de la cara ...
... y la bese, intentando demostrar todo mi amor y ella hizo lo mismo, aunque nuestro beso se convirtió en una batalla de lengua, succión de labios, mordeduras. Mientras nuestros sexos buscaban alejarse para volver a encontrarse con mucha violencia, nunca lo habíamos hecho con ropa, ni en esa posición, yo sentado, me estaba gustando que tomara la iniciativa y me diera placer.
Y en verdad si lo hizo, se cansó del mete y saca y empezó un movimiento circular con sus caderas buscando que nuestros órganos tuvieran el mayor contacto posible, y nosotros no parábamos de besarnos.
Mi mano seguía apretando un pecho y la otra ya jugaba libremente en la entrada de su ano con dos dedos, y ocurrió lo inevitable, no se puede tener tanto placer por tanto tiempo, la descarga en su interior la arrastro a un muy buen orgasmos, ella se quedó quieta y yo seguí introduciendo dos dedos en su ano y los movimientos de caderas y espasmos se alargaron por un par de segundos más, se quedó en esa posición un par de minutos para recuperarse, se desmonto y vio mi pene hecho un desastre, brillante lleno de flujos y semen, se agacho y con su lengua recorrió todo mi pene dejándolo impoluto, totalmente limpio.
Ana: Así está más bonito.- y con una sonrisa se fue a la ducha.
No teníamos mucho tiempo para otra cosa, teníamos que levantarnos temprano. Y teníamos que dividirnos, Ana tenía que ir a buscar a su prima a la estación de buses, para ello hable con uno de los policías para que la acompañara, irían ...