Mis dos mujeres , mi esposa y mi hermana - Relatos Eróticos

Mis dos mujeres , mi esposa y mi hermana

... primera en salir de la casa , le pague sus estudios , se independizó , luego salió el mayor de los míos y cuando el segundo , estaba a la mitad de su carrera universitaria , aun viviendo con nosotros, ocurrió la desgracia , mi mujer sufre un accidente cardiovascular , que la dejó postrada en cama.

Hice todo lo que pude , las mejores clínicas , los mejores doctores, gasté millones , estuvo meses conectada a una maquina , a las finales despertó pero ni siquiera nos reconocía , no hablaba ni se movía. Los médicos nos dijeron que nunca volvería hacer la misma.

Volvió a nuestra casa y nos tuvimos que adaptar , teníamos que atenderla en todo, mudarla , darle de comer , bañarla , todo.

Era muy triste verla así , pero como hombre, yo igual tenía mis necesidades físicas y aunque traté de reprimirlas por mucho tiempo , una noche ya no aguanté. Luego de haberme tomados unos tragos, estaba excitado , me fui a mi cuarto.

Me acosté a su lado , comencé a tocarla , sus tetas , sus piernas , sus nalgas , poco a poco me fui calentando aun más. Le abrí el pijama y le comencé a chupar las tetas , suavemente , apretándoselas con mis manos , se sentían tan ricas en mi boca que estuve un buen rato haciéndolo. La comencé a masturbar, primero por fuera , luego le metí un dedo y la gatillé . No emitía ningún sonido , no se movía , pero al rato comenzó a mojarse.

Le saqué la parte de abajo, le chupe la concha para dejársela aun mas mojada , me monté sobre ella solo apoyado en mis brazos ...

... para no cargarle mi peso y me la follé así , hasta que acabé. Ella ni siquiera reacciono, igual fue triste, me dio pena tanto por ella y por mi , pero no me arrepentí , estábamos casados , yo era su marido y tenia necesidades , estaba aguantando hace mucho tiempo y ya estaba hecho , me ayudó a desahogarme, realmente lo necesitaba.

Ya de ahí continué haciéndolo regularmente , ya sin remordimientos, era como un juguete sexual que siempre estaba a mi servicio, sin excusas , sin dolores de cabeza. Compré gel lubricante , tampoco quería hacerle daño , se lo aplicaba y me la cogía cada vez que quería. A veces era solo unos cinco minutos, otras veces pasaba mucho rato dándole y dándole a mi mujer , colocándola como yo quería , de lado , boca abajo saciando mis perversos instintos , siempre limpiándola después de los encuentros. De todas formas , no era feliz , faltaba esa comunicación y complicidad en el sexo.

Mi hijo menor términos sus estudios, se fue a trabajar fuera de la ciudad , quedándonos solo mi hermana , mi mujer y yo en la casa.

Me afecto la salida de mi hijo menor , el síndrome del nido vacío . Poco a poco fui entrando en una depresión , me coloque bueno para beber, lo hacia todos los días , estaba triste, sin ganas de nada. Mi hermana se daba cuenta y se preocupaba por mí , me decía que tenía que salir adelante etc etc. y yo, con borracho, la veía y la escuchaba, mirándole sus tetas , imaginando que ella al igual que yo , estaría necesitada de sexo.

En mis ...