1. Vacaciones de cuatro colegas pijos en el sur (part


    Fecha: 08/12/2025, Categorías: Bisexuales Autor: alvarodlp, Fuente: TodoRelatos

    ... silencio.
    
    Alvaro: Esa misma pregunta te podría hacer yo. ¿Te atráen los hombres? Lo digo porque he visto como me mirabas a los labios cuando nos fumábamos el cigarro y bro, creeme que parecías de todo menos un hetero con novia en Jávea.
    
    Estábamos enfrascados en esta guerra de egos-no egos masculinos cuando una de las chicas madrileñas se acercó.
    
    Chica: Chicos, aquí todo el mundo se lía con todo el mundo y me han dejado solita - Para nuestra sorpresa no pudimos ni responder cuando la chica nos cogió el cimbrel a cada uno con cada mano.
    
    Era una tía pequeñita, rubita, con buenos tetones, culo grande, pero delgada. Una delgada con curvas. Por lo que veíamos desde nuestra estatura de chocho tampoco iba nada mal.
    
    Álvaro: Eh eh, que aquí mi colega tiene novia.
    
    Nacho: Que te calles gilipollas - Dijo susurrándome al oído y dándome un codazo - Nada, nada, que estas muy guapa hoy. Que he pensado, ¿Por qué no dejamos a estos aquí y nos vamos a la casa donde nos quedamos los de mi grupo nosotros tres?
    
    Chica: Sí, mejor, mejor, que aquí se me va a oír mucho - Me guiñó un ojo, soltó mi nabo y me dió la mano para que nos fuéramos andando hacia donde estaba nuestra ropa.
    
    Salimos, nos vestimos y fuimos andando hasta la casa de estos chavales. La verdad es que si la nuestra cantaba que éramos chavales con pasta, estos no se quedaban atrás. Entramos y fuimos a una habitación con cama de matrimonio. La chica nos pidió ir al baño, mientras nosotros nos quitamos la ropa y ...
    ... nos secamos un poco. Cuando la chica salió, Nacho entró a lavarse los dientes y yo a echar una meadita antes de pasar a la acción.
    
    Nacho: No se me ha olvidado que tenemos una pregunta pendiente en el aire.
    
    Álvaro: Que si, máquina - Dije dándole una palmadita en la espalda- Pero date prisa que quiero coñete.
    
    Cuando regresamos a la habitación nos encontramos a la tía completamente sobada. Pero sobada, sobada, sobada. Nacho y yo nos descojonamos con cara de “Nada, hermano, que no follamos”. Nos fuimos al salón y nos sentamos en los sofás. La luz del amanecer entraba por una cristalera enorme que daba al jardín.
    
    Nacho: ¿Te renta una porno?
    
    Álvaro: De una, bro.
    
    Nos acomodamos, cada uno en un sofá. Yo me tumbé, él en cambio se quedó sentado con las piernas abiertas. Tras un rato de intensa búsqueda Nacho decidió que un vídeo de un trío de un chaval con dos gemelas nos iba a servir de aliciente para zurrarnos la picha. Empezamos viendo la trama del vídeo, pero a los 4 minutos las tías tenían ya la tetas fuera y a nosotros nos empezaba a apretar el pantalón. Empecé a acariciar mi rabo por encima del pantalón mientras que Nacho decidió meterse la mano del tirón. Coincidió que en la peli el chaval se quedó en bolas cuando nosotros hicimos lo mismo. Nacho se quitó todo directamente, mientras que yo me lo bajé y me lo dejé con las piernas aún metidas a la altura de los tobillos. Me bajé el pellejo, que después de una noche bebiendo, sudando y meando tenía un olor intenso, ...