Acampada con Manuel
Fecha: 09/08/2018,
Categorías:
Incesto
Autor: lenuma2, Fuente: SexoSinTabues
... botón, mientras sus manos tampoco estaban quietas. Me tocaba las tetas, la barriga, todo. - ¡Hay Manu! ¡Hay! Ya no aguantaba más. Un relámpago me recorrió el cuerpo de los pies a la cabeza mientras brazos y piernas se me crisparon. El cuerpo no me obedecía. ¡Solo Placer! - ¡Ah! ¡Me muero! ¡Qué gusto! ¡Sigue, sigue! Estuve disfrutando un buen rato mas, hasta que poco a poco el placer se fue transformando en hartazgo y casi en dolor. - Para ya mi amor, no sigas que me duele. Abrázame fuerte. Me has hecho muy feliz. - ¿De veras lo he hecho bien? - ¿No me ves? Me llevaste a la locura y me preguntas si lo has hecho bien. Si me das mas gusto me matas. Gracias Manu, eres un artista. - Me alegro que te gustase. Te confieso que tenía mucho miedo de hacerlo mal. Con las dos chicas que estuve no supe hacer o lo que sea, las dos me mandaron al carajo, ¡las dos! - Serán unas gilipollas. Yo tengo experiencia con ocho o diez y ninguno como tú. ¡Cómo será cuando aprendas! - Oye, por mi podemos empezar el segundo tiempo. Ver como te corrías me puso a cien. - Pégate a mí. Bésame. No tengamos prisa. Ponte boca arriba. - Ven a mí, Julia. Te quiero encima. - Si mi amor. Déjame tocarte. Me gusta tenerte así entre mis piernas, sentir tu polla, ver tu cara. Eres mio, solo mio. - Soy tu prisionero, tu esclavo. Abusa de mí. - Esa cosita dura me está poniendo cachonda otra vez, habrá que hacer algo por ella. - Con tu calorcito se pondría muy contenta. - No va a saber el camino. - No tengas miedo, si ...
... se pierde pregunta. - Parece que sabe… despacio, despacio. Deja que le ayude. - Qué gusto estar dentro de tí. Te deseo, quiero que te corras conmigo dentro. ¿Podemos? - Que gusto tenerte dentro. Te deseo otra vez, quiero sentir tus chorros mientras me corro, no tengas miedo que tomo pastillas. - Qué bonitas tetas tienes, son como me gustan a mí. Dame tus pezoncitos que te los aprieto. - Me gusta que me los aprietes, los tuyos también se endurecen. - Me gusta como te depilas el coñete. - Pelado del todo no me gusta, así está simpático. - Desde aquí perece el bigote de un señor. Así seguimos un ratito hablando, tocándonos, besándonos hasta que poco a poco me fue subiendo la excitación. Comencé a pasearme sobre Manuel de atrás a delante, sintiendo su duro miembro dentro de mí. Lo sentía llegar al fondo. Otras penetraciones me habían producido dolor llegando a impedirme disfrutar. Hoy, sin embargo, con el pene mas largo de todos, estaba en la gloria. - ¡Qué bien, Manuel! Te siento muy adentro y me está gustando. - Julia, me cuesta creerlo. Estar aquí contigo dándote gusto y disfrutando. - Me estoy poniendo, me viene. - Aguanta, disfruta mas. - Manu me corro, dame fuerte. - Me corro yo también. ¡Ahhh! No aguanto mas, toma mi leche. - Te siento, sigue, sigue. - Toma mas, córrete conmigo. Ponte loca. - ¡Ahhh! ¡Como me pones, cabrón! Tócame el culo, aprieta. - Culo, tetas, todo el cuerpo. Siénteme por todas partes. - Te siento, me llenas y me haces muy feliz, no pares. - Si, mi vida, ...